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Lauren Boebert, el rostro más conocido de los republicanos rebeldes. (Foto: MSNBC)

PANTANO DE LODO

Lauren Boebert, la cabecilla de la revuelta en el Congreso contra Kevin McCarthy

Hay que remontarse a un siglo para encontrar una situación similar en la escena política de Washington. La Cámara de Representantes de Estados Unidos no logra arrancar en la nueva legislatura ante la rebelión del ala dura del Partido Republicano.

Hechosdehoy / Arturo Vázquez Cano

Alto suspense en Washington. Las nuevas concesiones de McCarthy no logran desbloquear la Cámara de Representantes de Estados Unidos. El ala dura del Partido Republicano (FC, el caucos del caos o los 20 talibanes) forzó la séptima y la octava derrota de su líder parlamentario

Creado en 2015, el FC o Freedom Caucus es considerado como el bloque más radical e intransigente dentro del Partido Republicano. Donald Trump les alentó pero ahora bebe su propia medicina y sufre su rebelión. El FC provocó en su día la renuncia de John Boehner como presidente de la Cámara de Representantes.

Según la CNN y The New York Times, 19 de los 20 congresistas republicanos que han abierto esta crisis y no votaron por McCarthy pertenecen a ese grupo radical o recibieron su respaldo de cara a las elecciones de 2022.

A la vez, los dos congresistas republicanos que fueron postulados como alternativa a McCarthy el martes (Jim Jordan, de Ohio) y el miércoles (Byron Donalds, de Florida) son miembros del Freedom Caucus.

Los 20 republicanos que votaron por Jordan o Donalds son los siguientes:

Andy Biggs (Arizona)
Lauren Boebert (Colorado)
Josh Brecheen (Oklahoma)
Michael Cloud (Texas)
Eli Crane (Arizona)
Andrew Clyde (Georgia)
Byron Donalds (Florida)
Matt Gaetz (Florida)
Bob Good (Virginia)
Paul Gosar (Arizona)
Andy Harris (Maryland)
Anna Paulina Luna (Florida)
Mary Miller (Illinois)
Ralph Norman (Carolina del Sur)
Andy Ogles (Tennessee)
Scott Perry (Pensilvania)
Matt Rosendale (Montana)
Dan Bishop (Carolina del Norte)
Chip Roy (Texas)
Keith Self (Texas)

Otra característica que tienen en común es que la mayoría de ellos han cuestionado los resultados de las elecciones presidenciales de 2020, en las que resultó ganador Joe Biden.

FUENTE DE LA IMAGEN,GETTY IMAGES

Pie de foto,Varios de los republicanos que no votaron por McCarthy fueron apoyados por Trump en las elecciones de 2022.

Entre estos 20 parlamentarios hay 5 que fueron electos por primera vez en noviembre pasado y 15 están repitiendo en su escaño. Casi todos (14) los de este último grupo votaron el 6 de enero de 2021 a favor de desconocer los resultados de los colegios electorales para intentar evitar la certificación de la victoria electoral de Biden.  Lauren Boebert es uno de los rostros más conocidos de este grupo de republicanos rebeldes.

Una última característica que comparten es el hecho de que 17 de ellos contaron con el espaldarazo de Trump durante la campaña electoral de 2022.

Ahora, pese a un llamamiento expreso de Trump para que votaran a favor de McCarthy, estos congresistas mantuvieron su negativa a respaldarle durante, al menos, las tres votaciones del miércoles.

La congresista Lauren Boebert dijo explícitamente que Trump había hablado con ella y con otros para decirles que desistieran de lo que estaban haciendo. Pero que consideraba que, en lugar de ello, Trump debería llamar a McCarthy para decirle que es “hora de retirarse”.

La negativa de los 20 congresistas republicanos a votar por McCarthy surge no solamente de un rechazo contra él, sino que también responde a una agenda política concreta.

Son partidarios de fortificar la frontera con México y muy críticos de instituciones como el gobierno federal.

En cuanto al funcionamiento del Congreso, abogan por reformar sus procedimientos para dar más influencia a los parlamentarios y restar poder a figuras como el presidente de la Cámara, quien ejerce gran control sobre su funcionamiento, así como sobre la agenda legislativa.

La incapacidad de los republicanos para elegir a un presidente del Congreso entre sus propias filas fue criticada por el presidente Biden, quien dijo que se trataba de un episodio “avergonzante” para Estados Unidos.

Pero también ha sido criticado desde las propias filas republicanas. La congresista republicana Nancy Mace (Carolina del Sur) acusó al Freedom Caucus de haber tomado la agenda conservadora como “rehén”, “Esto no es sobre políticas. Esto no se trata de avanzar nuestra agenda conservadora. Esto es sobre ego y recaudación de fondos y de un montón de otra basura”, apuntó.

En cualquier caso, y con independencia de cuándo se resuelva esta crisis, es probable que quienquiera que asuma la presidencia del Congreso durante los próximos dos años tendrá por delante una labor extremadamente complicada para adelantar el trabajo en una Cámara marcada por la profunda división entre demócratas y republicanos. Y ahora también por el virus del factor FC.

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