El traductor Miguel Sáenz ocupará el sillón B de la Real Academia Española (RAE). Este puesto estaba vacante desde el fallecimiento de Eliseo Álvarez-Arenas, en septiembre de 2001, según informó la citada institución académica. Así han elegido por mayoría este jueves a Sáenz frente a la candidatura que presentaba el también traductor Antonio Pau.
La candidatura de Miguel Sáenz estaba avalada por los académicos Luis Goytisolo, Pedro Álvarez de Miranda y Margarita Salas, mientras que la de Antonio Pau recibía el apoyo de Luis María Anson, Antonio Fernández Alba y Salvador Gutiérrez.
El traductor que se sentará en el sillón B nació en Larache, en Marruecos, en 1932. Es doctor u licenciado en Filología Alemana, y tras una larga trayectoria centrada en el ámbito jurídico, entró en el cuerpo de traductores de las Naciones Unidas durante cinco años en sus sedes de Nueva York, Ginebra y Viena, entre los años 1965 y 1970.
También se le debe ser el traductor de la Organización Mundial del Comercio, de la Organización Panamericana de la Salud, de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación y del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola. Durante esos años, cursó estudios superiores de alemán en la Universidad Complutense de Madrid.
Y allí fue profesor de Teoría de la Traducción en el Instituto Universitario de Lenguas Modernas y Traductores e Intérpretes. Hacia 1992 abandonó este trabajo para dedicarse enteramente a la literatura y a la traducción. Debido a la gran cantidad de traducciones que había realizado, le hicieron merecedor del Premio Nacional de Traducción en 1981 por El rodaballo, de Günter Grass, y del Premio Nacional de Traducción de Literatura Infantil y Juvenil en 1983 por La historia interminable, de Michael Ende.
En 1992 se hizo con el Premio Nacional de Traducción por toda su obra, en 1996 consiguió el premio Nacional de Traducción de Austria, un año después le fueron concedidas la Medalla Goethe y la Orden del Mérito de la República Federal de Alemania y en 1998 se hizo con el premio Aristeion de la Unión Europea.
La RAE cuenta con la totalidad de 46 sillas académicas entre las que se encontraban vacantes las letras B y R, cuyos titulares eran don Eliseo Álvarez-Arenas y don Antonio Mingote, ambos recientemente fallecidos.