Jueves importante en la relación de Colombia con Estados Unidos. Se cumplen los tres lustros del Plan Colombia y se pon en las bases para una nueva relación de futuro cuya primera meta es la paz inminente.
El proceso de deshielo y fin de la Guerra Fría en la Cuenca del Caribe tuvo el primer hito en la reanudación de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba. Ahora está abierto al reconocimiento del nuevo Poder Legislativo en Venezuela (ver en Hechos de Hoy, Mitzy Capriles alerta de una emergencia humanitaria en Venezuela) y a la paz en Colombia.
Para los expertos la nueva relación entre Washington y Bogota -lo que sería Plan Colombia II– tendrá tres grandes áreas -según Mark Feierstein, asesor del presidente Barack Obama para el Hemisferio Occidental. La primera es seguridad, lo que involucra lucha contra el narcotráfico y desmovilización de la guerrilla; la segunda, la expansión de la presencia estatal, y la tercera, justicia, restitución de tierras y reparación de víctimas. La ayuda de Washington podría rondar los 400 millones de dólares.
En este viaje, Juan Manuel Santos ha querido ser sobre todo didáctico para explicar los pilares de la paz, negar tópicos y miedos infundados, y dar su visión amplia sobre el acuerdo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Avanzó la fecha del 23 de marzo en La Habana para su firma.
En esta visita de tres días a Washington se reúne con el presidente Barack Obama, líderes del Congreso, el secretario de Estado, John Kerry, y participa de una agenda amplia de contactos, reuniones y declaraciones. Tiene un almuerzo en la Cámara de Comercio, así como una reunión con el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, congresistas, y la inauguración de la nueva sede diplomática de Colombia en Washington.
“He venido aquí a decir gracias”, afirmó también Juan Manuel Santos al cumplirse el 15 aniversario del Plan Colombia. “Estados Unidos ha sido un gran aliado para poner las condiciones necesarias para el fin del conflicto y espero que lo sea para la construcción de la paz”, afirmó el presidente de Colombia.
En sus reuniones, Juan Manuel Santos aseguró que uno de los mayores retos que enfrenta es que la ciudadanía “le tiene miedo a la paz”. “Colombia es un país acostumbrado a la guerra. Es como el prisionero que lleva cuarenta años preso y lo ponen en libertad. Es algo aterrador”, apuntó. Ha subrayado que la aceptación ciudadana es uno de los grandes escollos tras más de cincuenta años de conflicto.
Juan Manuel Santos ha insistido también en el punto crucial. Habrá acuerdo con las FARC y Colombia necesitará la ayuda de Estados Unidos en el periodo posconflicto. En los escollos de esta visita -y es asunto para no obviar- el republicano Mario Díaz Balart advirtió sobre Ricardo Palmera, alias Simón Trinidad, guerrillero de las FARC condenado a 60 años y encarcelado en Estados Unidos desde 2004.
“Estados Unidos tiene que mantenerse firme en su oposición a liberar a narcotraficantes como Simón Trinidad, cuya liberación comprometería la seguridad nacional y no debería ser usada como elemento de negociación”, advirtió. Juan Manuel Santos espera sin embargo superar todos los escollos y evitar nuevos pantanos políticos.