Hillary Clinton criticó con dureza el lema utilizado por el presidente Barack Obama para definir su doctrina de política exterior de "No hacer estupideces". Señaló, con cierto sarcasmo, que, "las grandes naciones tienen que organizar sus principios, y ´No hacer estupideces´ no es un principio de organización".
La exsecretaria de Estado, Hillary Clinton, lo pudo decir más alto pero no más claro. En declaraciones a Jeffrey Goldberg en la revista The Atlantic -una publicación de gran prestigio y tradición en la costa este de Estados unidos-se posicionó en contra de las decisiones del presidente Barack Obama en Oriente Medio.
Su posición cobró importancia en momentos críticos en la región -pérdida del control de Bachar el Asad de parte de su territorio, clima de caos en Irak y situación de desastre en la Franja de Gaza tras la nueva guerra de Israel contra Hamás-. La posición de Hillary Clinton, como apuntaron analistas, situó al presidente bajo fuego amigo. A las críticas en el Partido Republicano se unen ahora las del lobby de los Clinton en el Partido Demócrata evidenciando la decepción que crece contra el liderazgo del presidente.
Hillary Clinton quiso sobre todo aclarar que sus tesis no fueron atendidas en su momento. La exsecretaria situó el origen de las actuales tensiones en el error que se cometió al no apoyar a la oposición en Siria para hacer frente a la guerrilla suní radical de Estado Islámico (EI o ISIS) a la que ahora se ataca en Irak.
"El fracaso para ayudar a construir una fuerza de combate creíble con las personas que fueron los autores de las protestas contra El Asad -había islamistas, había laicos, había de todo- el hecho de no hacer eso dejó un gran vacío que los yihadistas ahora han llenado", afirmó a The Atlantic. La guerrilla empezó sus grandes avances en Siria en 2013. A partir de ese momento se extendió al norte de Irak.
Hillary Clinton reveló que como secretaria de Estado defendió la importancia de ayudar al Ejército Libre de Siria. "Si hubiéramos apoyado, entrenado y equipado temprano a un núcleo del Ejército Libre de Siria, tendríamos, número uno, mejor idea de lo que estaba pasando en el terreno y, dos, habría sido de ayuda para levantar una oposición política creíble", señaló. Insistió que de esa manera se habría ayudado a fortalecer la oposición, difícil de unir por las continuas diferencias entre los sirios exiliados y las milicias sobre el terreno.
La exsecretaria de Estado se mostró también en desacuerdo sobre la manera en que actuó el presidente en las negociaciones sobre el programa nuclear de Irán y el Grupo 5+1 (EEUU, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania). "Siempre he estado entre aquellos que sostienen que no tienen derecho al enriquecimiento. Contrariamente a su reclamación, no hay tal derecho a enriquecer. Esto es absolutamente infundado. No existe tal derecho", dijo quien puede ser la candidata del Partido Demócrata a la presidencia de Estados Unidos en 2016.
La personalidad de Hillary Clinton