El huracán Hilary, nacido en el Pacífico oriental, en lugar de avanzar sobr México y entrar en las aguas del Golfo de México, giró al norte sobre la costa Oeste de Estados Unidos. Para los expertps, un fenómeno que ilustra sobre la rapidez con la que avanza en todo el mundo el efecto del cambio climático.
El huracán Hilary desató una gran cantidad de lluvias torrenciales en el suroeste de Estados Unidos. Activó la primera alerta de tormenta tropical para California.
Hilary arrojó más lluvia que las habituales para todo un año en partes de tres estados: California, Nevada y Arizona. La amenaza de nivel 4 de 4 es la primera vez que se emite para el sur de California.
Hilary fue un poderoso huracán de categoría 4 con vientos sostenidos de 233 kilómetros por hora y con ráfagas aún más fuertes, según los datos del Centro Nacional de Huracanes.
Gracias a Hilary, “lo que serían varios años de precipitaciones podrían caer en algunas de las zonas más secas de California”, avanzó Daniel Swain, científico del clima de la Universidad de California en Los Ángeles. Así sucedió.
Entre esos lugares, Death Valley, California, el lugar más caluroso de la Tierra. Death Valley normalmente recibe alrededor de 50 milímetros de lluvia durante todo un año, según datos del NWS. La humedad de Hilary desencadenó suficiente lluvia para dar al Valle de la Muerte el equivalente de 1 a 2 años de lluvia en un solo día.
Hubo avisos de inundaciones en todo el sur de California, que se extiende desde San Diego hasta Los Ángeles.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos adelantó que el paso de Hilary provocaría lluvias “catastróficas” y “amenazantes” inundaciones en Baja California y el sur del Estado de California. Desde San Quintín, la tormenta subió la península hasta alcanzar Ensenada, Rosarito y Tijuana, para después cruzar la frontera México-Estados Unidos y llegar a San Diego. Hilary provocó la primera alerta de tormenta tropical de la historia para esa región.
La temporada de huracanes en el Pacífico comenzó en el mes de mayo. Este año, arrancó con el ciclón Adrián y la tormenta tropical Bret. El primero se acercó a México por la zona del Pacífico, y el segundo por la del Atlántico. A ellos les siguieron otros fenómenos como el huracán Beatriz, que amenazaba a las costas del oeste mexicano con vientos de 120 kilómetros por hora y que terminó disipándose frente a las costas de Jalisco.