Diputados, embajadores, senadores, y analistas, una nube de expectación en el nuevo acto de Albert Rivera tras estar bajo los focos en el Foro ABC donde mostró su tirón (ver en Hechos de Hoy, Inés Arrimadas logra la unión de Ciudadanos, PSC y PPC ante Carme Forcadell).

La expectación ya es mayor. Todas las encuestas le han situado como la segunda fuerza política con una progresión que no encontrado aún su techo, Ciudadanos superó primero a Podemos y el fenómeno de Pablo Iglesias. Después avanzó sobre Pedro Sánchez y un PSOE dubitativo. Ahora se consolidó como segunda fuerza para su asalto al PP de Mariano Rajoy. En los cuarteles generales de Génova ya hay trackings que colocan a Ciudadanos como primera fuerza política.

En los círculos de los embajadores, los análisis se interrogan sobre la fuerza de Ciudadanos para incluso formar un gobierno monocolor. Se aguarda ahora con atención su programa de reformas constitucionales y las correciones al programa económico. En este marco se presentó Albert Rivera al desayuno organizado por la agencia Europa Press, uno de los eventos del Madrid político en el Hotel Villamagna.

Hubo anuncios importantes. El presidente de Ciudadanos avanzó que los 52 diputados que suman Ciudadanos, PSC y PP en el Parlament de Cataluña presentan juntos este miércoles un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional. Es su primera acción conjunta por la declaración independentista. Muestra la capacidad de liderazgo de Inés Arrimadas y envía señales de que Ciudadanos busca la cultura del pacto con el Partido Popular y el Partido Socialista. 

Albert Rivera explicó que José María Espejo, vicepresidente de la mesa del Parlamento de Cataluña y miembro de Ciudadanos, pedirá que se levante acta de todas las reuniones por si de ellas se derivan posibles acciones judiciales contra los diputados independentistas. "Estamos intentando impedir todo lo que sea saltarse las leyes. Hay que anular cualquier efecto jurídico de esa declaración", explicó Albert Rivera. "Es una cortina de humo. Se han vuelto independentistas en proporción de lo que han robado en nombre de Cataluña. Hablamos de la moción y nos olvidamos del saqueo", subrayó destacando la conexión entre el independentismo y la corrupción política.

"Hablemos claro, aquí hay una banda organizada formada por Pujol y Convergencia. La reunión entre Pujol y Mas, ahí está, el capo y la banda. Pujol decía: ¿quién coño es la UDEF? Pues ya lo sabe, los que estaban el otro día en el sofá de su casa”, dijo con firmeza y claridad Albert Rivera argumentando que Artur Mas no puede encabezar un Gobierno con el que “algunos no están de acuerdo”.

"Lo que pasa en Cataluña es consecuencia de los problemas de España. Muchos catalanes, de buena fe, piensan que la solución para la corrupción, los recortes o el paro es romper con España. Hay que solucionarlo para convencer y seducir. Esto no se soluciona en un cuarto de hora, pero si somos capaces de reformar este país, subir un grado en la calidad democrática, económica y social, bajará el anhelo independentista", fue el análisis y el reto de Albert Rivera.