La semifinal española de Garbiñe Mururuza y Paola Badosa supo a final anticipada en muestra del poder del tenis espoañol, tanto masculino con el largo reinado de Rafael Nadal, como femenino. Lo que apuntaron los analistas deportivos se cumplió. Emergió de nuevo la mejor Garbiñe con un tenis en profundidad, de golpes magistrales, y enorme fortaleza mental.
La tenista Garbiñe Muguruza hizo historia esta madrugada en Guadalajara, en México. Fue muy consciente de ello tras imponerse a la estonia Anett Kontaveit por 6-3, 7-5 y convertirse en la primera española campeona del torneo de Maestras. "Es un título muy grande, histórico y hay que celebrarlo porque los triunfos en el deporte son muy fugaces", explicó en la Cadena SER en el programa Hoy por hoy a Àngels Barceló.
Muguruza se ha mostrado feliz. "Ha sido una temporada espectacular". Y ha explicado cómo se ha sentido a lo largo del partido. "Estuve siempre con la esperanza y le di la vuelta al marcador como una hormiguita. Ha sido una súper sensación".
La tenista española se ha mostrado esperanzada en que este hito en la historia del deporte sea un punto de partida capaz de comenzar un camino que transiten otras compañeras y otras generaciones. "Ojalá esto inspire a muchas chicas de que esto se puede conseguir porque yo estoy aquí para demostrarlo".
"Ha sido algo histórico. Y, sí, no te lo puedo negar. Hemos tomado algunos tequilas", ha bromeado Garbiñe Muguruza.
En la final, Garbiñe, fue mejor en el servicio y sacó provecho de 38 errores no forzados de la estonia Anett Kontaveit para ganar la final por 6-3, 7-5 y convertirse en la primera española campeona del torneo de maestras.
"No he pensado lo de la historia porque no quería ponerme más nerviosa, sabía que tenía bastante presión. Es genial haber conseguido esto de la primera mujer española con mi nombre en la historia", agregó.
La número cinco de la clasificación mundial reconoció que el triunfo le permitirá empezar muy motivada la temporada 2022 y dejó entrever que tiene en mente reinar en los Grand Slams que le faltan, los Abiertos de Australia y Estados Unidos, y en todo lo que se pueda.
"Quedan unos grandes que me faltan. Son los torneos que más motivan. El ránking ya fue en su día, pero es esa sensación de ganar lo que me empuja a ser ambiciosa", dijo.
Muguruza explicó que los torneos de Grand Slam son más vistosos, pero cuando una tenista está entre las ocho y juega cada partido como una final, sabe que la que gane ese trofeo es la mejor del año.
"Quizás desde afuera se aprecia menos, pero para nosotros el trofeo de maestra equivale a un Grand Slam", concluyó.