En los hechos de hoy, ya aparece la hipótesis de un Frankenstein II como una pesadilla y un enorme lío de choque frontal entre el sanchismo, la extrema izquierda de Yolanda Díaz (Sumar) y el pablismo de Pablo Iglesas (Podemos).
Fuerte malestar en sectores del PSOE por el uso del catalán y el euskera en el Congreso de los Diputados. Es la iniciativa que ha lanzado Yolanda Díaz a ERC, Junts y EH Bildu en las conversaciones y negociaciones que lidera en ausencia de Pedro Sámches.
La portavoz del Gobierno en funciones, Isabel Rodríguez, se abrió a aceptar la medida propuesta por Yolanda Díaz como guiño a los independentistas. Las federaciones socialistas desconocen qué se está negociando
La lista de concesiones del hipotético Gobierno de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz a los independentista parace que va a ser amplia. Todo vale para conseguir los apoyos de los partidos nacionalistas a la posible investidura del presidente del Gobierno en funciones. La líder de Sumar y vicepresidenta segunda del Gobierno en funciones ha planteado la reforma del Reglamento del Congreso para que los diputados puedan expresarse en las lenguas cooficiales: “Esto sería un avance en un país que es plural y diverso”.
Yolanda Díaz, en una entrevista en TVE, ha defendido esta propuesta, que ya fue rechazada en su día por el PSOE, en medio de las negociaciones que Sumar está llevando a cabo por su cuenta con las fuerzas independentistas para facilitar la investidura de Pedro Sánchez.
Según ha dicho, Sumar está negociando, por un lado, con los socialistas en una negociación que coordina Nacho Álvarez, secretario de Estado de Derechos Sociales y portavoz económico de Sumar, y, por otro, con ERC, el partido de Puigdemont y otras fuerzas, bajo la dirección del exdiputado de los comunes Jaume Asens.