La información ofrecida el sábado fue de cautela. El domingo apagón total. Pero este lunes, un día antes de la audiencia del Rey Felipe VI a Pedro Sánchez se filtró lo que sucedió de verdad en el Comité Federal del Partido Socialista (PSOE) a puerta cerrada (ver en Hechos de Hoy, El pacto de Pedro Sánchez con Pablo Iglesias y Podemos, peligroso disparate).
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, por jemplo, afirmó que no ve claro un Gobierno de coalición de su partido con Podemos, y recalcó también que el 20 de diciembre los socialistas sacaron el peor resultado de su historia. "Un gobierno de coalición con Podemos no lo veo. No lo veo. No es el gobierno socialista, con ese proyecto progresista, reformista que se ha hablado aquí, con esos 8 pactos que apoyo del secretario general, que necesita nuestro país", dijo Susana Díaz a puerta cerrada, en unas grabaciones en las que se aprecia la tensión en algunas intervenciones.
Susana Díaz rebatió la afirmación que Pedro Sánchez hizo la noche electoral: "El 20 de diciembre el Partido Socialista no hizo historia. Sacó el peor resultado de la historia".
En su análisis, reconoció que el mapa político era distinto, pero subrayó que el PSOE no consiguió ganar a un PP "que tenía a sus espaldas la mayor brecha de desigualdad entre los ciudadanos y que tenía a sus espaldas los casos de corrupción seguramente más graves". "Si el Partido Popular nos ganó estas elecciones en estas circunstancias es que no estábamos en el camino correcto", añadió.
Los presidentes de Asturias, Javier Fernández, y de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, fueron muy duros contra Podemos. Fernández recalcó que Pablo Iglesias dice claramente que quiere ocupar el espacio político del PSOE. "Alguien que dice que los socialistas son muy buena gente gobernados por una hueste de mandarines. Alguien que está propiciando un motín, un motín de las bases contra sus dirigentes. Alguien que no nos ataca por lo que hacemos, nos ataca por lo que somos", recalcó.
"Somos un partido de gobierno y ellos no, ellos no quieren nada donde haya un rostro humano sufriendo detrás", avisó por su parte Fernández Vara, que recalcó que ninguno "ha pedido que nadie sufra". "Que se manipule, que se organice el país, que se mueva internacionalmente, pero por favor no me traigas pobres ni me traigas desharrapados que no quiero saber nada de ellos", dijo en su intervención.
Mientras Fernández se mostró convencido de que habrá próximas elecciones, Fernández Vara opinó que ese es un escenario que hay que evitar, porque no le "iría bien" ni al PSOE ni a España.
"La ley de vasos comunicantes en la que hemos entrado hace que pudiera haber modificaciones, lo que gane uno lo pierda el otro y siga sin sumar. ¿Y qué le decimos a los españoles dentro de cuatro meses si después de otras elecciones seguimos sin sumar?", se preguntó.
Fernández Vara también incidió en su rechazo a los independentistas y lo justificó: "Si nosotros no dejamos claro que el PSOE no tiene nada que ver con el independentismo ni por activa ni por pasiva, a nosotros en Extremadura nos matan y yo lo tengo que decir".
El exdiputado y ex aspirante a liderar el PSOE, Eduardo Madina, advirtió contra ese pacto. "Si sujetamos en el gobierno de España toda la arquitectura de ese gobierno sobre 17 tipos que la quieren partir, partiremos España y partiremos el PSOE", dijo. En el rechazo a gobernar "con el permiso de los independentistas" insistió también el aragonés Javier Lambán, que cree que eso "no sería un gobierno socialista sino que sería el patíbulo definitivo del Partido Socialista".
Para Lambán al PSOE sólo le queda "por tanto ir a otros caladeros de posibles acuerdos en fuerzas políticas de la derecha dispuestas a programas reformistas como puede ser el PNV o Ciudadanos". Admitió que él gobierna en su comunidad con Chunta Aragonesista, que defiende "el derecho de autodeterminación pero que lo tiene, por así decirlo, durmiente". Sin embargo, recalcó que su CHA dijese en un Consejo de Gobierno que "quiere plantear la autodeterminación sería cesado de manera inmediata".
Del mismo modo, el valenciano Ximo Puig, que gobierna con Compromís, se remitió a lo dicho por Lambán para destacar que CHA defiende la autodeterminación "pero al final lo que han firmado ellos allí y con lo que están gobernando no tiene nada que ver con la autodeterminación" y lo importante es "lo que está en el papel", de manera que, subrayó con firmeza, lo que el PSOE debe consultar con sus militantes en referéndum "es el papel".