En los hechos de hoy, el jefe de la oposición censuró en Barcelona que Pedro Sánchez haya vuelto a pedir el apoyo a Bildu y denuncia sus acusaciones contra el PP, una “ignominia que no se puede aceptar”.

“Decir como ha dicho Sánchez -probablemente el que no ha hecho nada contra el terrorismo porque se lo encontró solucionado cuando llegó al Gobierno- que al PP nunca le interesó acabar con ETA es una ignominia impropia de un presidente del Gobierno que no podemos aceptar en ningún caso”.

Reprochó a Sánchez que considere “más peligroso” al PP que a Bildu pese a que “ha defendido la Constitución siempre, ha dado la cara siempre y se la han partido siempre”.

Reclamó el voto útil de los constitucionalistas para recuperar una Barcelona “segura, limpia y con calidad de vida” en la que Daniel Sirera tenga la “llave” de la gobernabilidad para conseguirlo.

Frente al “declive” de la Barcelona de Colau y del socialista Collboni con el aumento de la inseguridad, pérdida de oportunidades económicas y mala gestión, el presidente del PP ofrece la alternativa “seria, centrada y honesta” de Sirera.

Agradeció a los dirigentes, afiliados y simpatizantes de Ciudadanos el apoyo que están dando estos días al PP porque “han entendido el mensaje de que si nos unimos somos más fuertes y que nuestro deber moral y ético no es presentar un centro constitucionalista dividido, sino volver a unir el constitucionalismo” detrás del PP.

Hizo un llamamiento a todos los que confiaron en otras elecciones en Sánchez pero están defraudados por que ha hecho lo contrario de lo que prometió y a los que votaron a partidos que iban a sumar con el PP “pero acabaron dividiendo el voto y dando gobiernos a independentistas y a la izquierda”.

Se comprometió a “desalojar a los okupas en 24 horas”, a que se declaren nulos sus empadronamientos y a que los ayuntamientos no cobren los impuestos a los propietarios de las viviendas durante el tiempo que dure la okupación.

“No estamos condenados a tener malos gobiernos en Barcelona, en Cataluña ni en el conjunto de España. El 28 de mayo tenemos una oportunidad para empezar a conseguir algo grande y propiciar el cambio”.

Afirmó que el objetivo del PP pasa por “recuperar Barcelona” y hacer de ella una ciudad líder en empleo, no en delincuencia; pujante en inversión, no en fuga de empresas y abierta al mundo.

Recordó el “problema de Rodalíes que cada día va a peor” ante la inacción de la ministra de Transporte y Vivienda, reprobada merecidamente y recalcó que muchos de los problemas de Barcelona, Cataluña y España son consecuencia de la frivolidad y da imposición de las minorías radicales sobre las mayorías.