El diestro mexicano Joselito Adame, que cortó dos orejas y salió por la puerta grande, superó al madrileño José Tomás que tan solo se llevó una oreja, muy protestada, en el mano a mano que causó máxima expectación a lo largo de tres meses en la Monumental Plaza México en esta décima sexta fecha de la temporada grande. El espectáculo taurino alcanzó un lleno total y vivió un ambiente de auténtica gala durante todo el día.
En la corrida, el español se llevó una oreja de su primer toro aunque sufrió dos revolcones sin heridas; en el segundo tuvo detalles, y su tercero fue devuelto por falta de presencia y enfrentó un cuarto, el primer reserva que también fue pitado y abrevió ante la rechifla y la desaprobación general. La tarde estuvo lejos de ser buena para José Tomás, quien se vio falto de sitio, sin ritmo y disminuido físicamente.
El español no brindó ningún toro al público mexicano y se fue sin pena ni gloria, mientras que su rival, Joselito Adame, se quedó con el triunfo al cortar dos orejas de su tercer toro. Tomás encendió la tarde y al público al ser prendido de fea manera en dos ocasiones en su primer toro.
La expectación por ver a Tomás fue muy alta por ser la segunda vez que actúa en México desde la cornada que lo puso al borde de la muerte y hace dos años en 2015, que se presentó en Juriquilla.
José Tomás no toreaba desde el 2 de mayo del 2015, cuando volvió a la localidad mexicana de Aguascalientes, en cuya plaza sufrió una brutal cogida en el 2010 que estuvo a punto de retirarlo para siempre de los ruedos. Desde aquella terrible cornada, sus apariciones todavía han sido mucho más esporádicas, generando todo tipo de especulaciones sobre su situación anímica y física.
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