Los ingredientes
– 100 gramos de mantequilla blanda
– 100 gramos de harina
– 1 cucharadita de levadura para hornear
– 100 gramos de azúcar
– 2 huevos
– 1 cucharadita de esencia de vainilla
– 2 cucharadas de leche
– una pizca de canela en polvo
– unas barritas de Kit Kat
– mantequilla para engrasar los moldes
– coco rallado o azúcar glace
– un poco de chocolate blanco
La preparación
Colocar la mantequilla “del tiempo” en un cuenco. Mezclar con el azúcar hasta conseguir una masa uniforme.
Incorporar los huevos uno a uno y la leche en la masa.
Añadir la canela. Por último se incorpora la harina mezclada previamente con la levadura para hornear y se sigue mezclando todo para obtener una masa totalmente homogénea.
Engrasar los moldes de cupcakes para que no queden pegados. Si los moldes son de papel; no es necesario.
Rellenar los moldes con la masa. ¡Piense en que “crecerán” así que no los rellene a rebosar!
Partir trozos de las barritas de Kit Kat e incorporar un trozo en el centro de cada cupcake.
Hornear a 180º durante unos 25 minutos aproximadamente. Dependerá del tamaño de los moldes y la cantidad de masa que lleven. Pinche con una aguja fina de hacer punto. Si sale seca, los cupcakes están listos
Dejar que se enfríen unos cinco minutos y sáquelos del molde.
Calentar a mínima potencia un poco de chocolate blanco.
Untar la parte superior de cada cupcake con el chocolate blanco derritido y “nevarlos” después generosamente con coco rallado o con azúcar glace.
De todos modos a la hora de decorar los cupcakes no hay que ponerle límite a la fantasía.