El Santiago Bernabéu y los miembros de la Policía Nacional se han preparado para garantizar la extrema seguridad del partido de fútbol más esperado. Por ello, el Real Madrid y el FC Barcelona verán con casi toda seguridad las medidas dispuestas para el buen desarrollo del encuentro después de los últimos acontecimientos sucedidos en París, Bruselas y Hannover.
El partido se disputa este sábado en el estadio Santiago Bernabéu, a las 18:15 horas, y se prevé un lleno absoluto: más de 80.000 espectadores dentro del recinto y varios miles en los alrededores viviendo el ambiente único de estos acontecimientos. Una fiesta deportiva que empieza a ser, desde ya, un quebradero de cabeza para las autoridades.
El fuerte dispositivo se concretó en la tarde de este miércoles en la reunión que desde las 18:30 mantuvieron los responsables de seguridad tanto del Ministerio del Interior, como del Ayuntamiento de Madrid y el propio Real Madrid. Algunas de las medidas que se tomarán ya se filtraron a la prensa deportiva de Madrid y podría incluir acciones inéditas en el feudo del Real Madrid.
Es el caso de los anillos de seguridad. Los accesos al Santiago Bernabéu estarán divididos en tres anillos de seguridad en los cuales se efectuarán los primeros controles. Será una manera de ir filtrando poco a poco al público que se acerquen al encuentro. En esos primeros controles se vigilará no sólo que no existan elementos de riesgo, sino también un máximo control a los aficionados con entradas.
También habrá presencia de detectores de metales. El acceso al Santiago Bernabéu no cuenta con detectores de metales de forma habitual. Incluso en los partidos de más alta tensión se suele usar un cacheo convencional como máxima forma de control. En esta ocasión, sin embargo, podrían incluirse detectores de metales portátiles con los que los miembros de la seguridad privada del club analicen la presencia de objetos peligrosos. También habrá cacheos exhaustivos que incluso se extenderán a la comida que lleven los aficionados para evitar que se esconda en ellos elementos peligrosos.
Asimismo, según fuentes de las fuerzas del orden, entre las medidas, se incluirán la prohibición de acceso al estadio con mochilas o grandes bolsos para evitar que se porten en ellos armas o explosivos. En otros partidos se permite el acceso, aunque siempre son revisados para evitar que se introduzcan armas u objetos arrojadizos.
En la reunión del miércoles entre el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y el secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, se calificó el partido como “clásico de alto riesgo” y anunciaron que contará con mil efectivos de la Policía Nacional.
“Este número de agentes es muy superior al de otros partidos y más del doble de otros encuentros declarados así. Además, a falta de detalles, habrá también 1.400 vigilantes de seguridad privada, efectivos de Policía Municipal, emergencias y Protección Civil. Será un dispositivo intensivo para garantizar la seguridad y la absoluta normalidad del partido”, aseguró Martínez.
Algunos empleados tendrán que entrar incluso antes, a las 14.15, cuatro horas antes del encuentro. Prevenciones de seguridad y control de banderas, porque el Real Madrid pretende requisar cualquier elemento con connotaciones políticas. “Sea una estelada o una bandera de la falange”, advirtieron los responsables de seguridad del club.
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