Mosul es el último gran bastión de Estado Islámico en Irak
Con los 1,8 millones de habitantes que llegó a tener, fue una de las ciudades más diversas de Irak, con una población de árabes, kurdos, asirios, turcomanos y muchas otras minorías religiosas. Pero en junio de 2014, la ciudad fue invadida por Estado Islámico (ISIS).
Hace tres días comenzó la ofensiva de 4.000 peshergas kurdos y 30.000 militares iraquíes para liberar Mosul. La ONU asegura que más de mil personas han abandonado ya la zona con dirección al campo de refugiados de Al Hol, en territorio sirio.
Mientras ISIS distribuye un vídeo idílico de propaganda sobre la situación de la ciudad, con cafeterías llenas de gente, abundancia de comida y cuidadas zonas verdes, gran tráfico de coches por todas partes… los que han logrado huir aseguran tajantemente: "Matan a cualquiera que esté hablando por teléfono". Afirman que "es prácticamente imposible abandonar la ciudad, hay controles por todas partes. El que se arriesga a huir, pone en peligro su vida".
La ONU alerta ya de una nueva ola de refugiados y se teme que los nuevos campamentos instalados del lado sirio no serán suficientes para dar cabida a los que salen con lo puesto para huir de la guerrilla radical suní.
El inicio de la operación militar fue anunciado el lunes por el primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, que prometió restablecer la estabilidad en la segunda ciudad más importante de Irak. El presidente estadounidense, Barack Obama dijo el martes que confía en que Estado Islámico será derrotado en Mosul. Obama, eso sí, admitió que la batalla será dura y "difícil". Si se logra recuperar el control de la ciudad, sería un golpe enorme para las finanzas del Estado Islámico.
Comenzó la primera fase y hasta el momento los avances no son muchos. El ejército iraquí junto a la Policía federal y unidades como las fuerzas antiterroristas iraquíes lideran la compleja reconquista de la ciudad. Su base se encuentra a 60 kilómetros de Mosul, en Al Qayara. Junto con los peshmergas -"los que se enfrentan a la muerte", en kurdo- han liberado del ISIS a unos 20 pueblos, según sus propios datos.
La madre de todas las batallas está todavía por llegar y será cruel. Se puede extender durante semanas e incluso meses, con el duro invierno por medio. "Es cuestión de tiempo", como aseguró este miércoles el ministro de Exteriores alemán Frank-Walter Steinmeier. La complejidad de esta operación militar, así como los retos que plantea la ayuda humanitaria hasta lograr la estabilidad, supera todo lo vivido hasta ahora.
Steinmeier alertó también de la importancia de pensar ya desde ahora en el día después de la reconquista de Mosul para que no ocurra lo que teme el comisario europeo de Seguridad, Julian King, quien llama la atención sobre el "serio riesgo" de que regresen a Europa combatientes del Estado Islámico tras la caída de Mosul.