El asesinato de Sergio Santamaría refleja la terrible situación que atraviesa Venezuela y la urgencia de que comience a funcionar el corredor humanitario. El presidente interino, Juan Guaidó, anunció el reparto de medicinas y alimentos a partir del sábado 23 de febrero. Gauidó escribió en su Twitter: Un mes después de juramentarnos lo lograremos: este #23F entrará la ayuda humanitaria.
eL empresario burgalés, Sergio Santamaría de 79 años, afincado desde hace décadas en Venezuela, fue asesinado por un grupo de cuatro encapuchados, fuertemente armados, cuando trataban de robarle el vehículo en el que viajaba con su chófer. Según informa Diario de Burgos, los encapuchados cerraron el paso al vehículo en el que viajaba Santamaría, natural de la localidad de Celadilla Sotobrín (Burgos).
Los hechos ocurrieron el pasado viernes, 8 de febrero, cuando el empresario español y su chófer viajaban por la carretera de Lara-Zulia, en el municipio de Simón Bolívar. El chófer dio marcha atrás para huir, pero los encapuchados comenzaron a disparar de inmediato con armas largas.
El chófer recibió un tiro en la cabeza y Santamaría en el estómago y la cadera. Pese al impacto de bala, el chófer logró llegar a un hospital en el que ambos ingresaron con vida casi 45 minutos después de ser atacados.
"Se recuperó bien de la operación y parecía que estaba fuera de peligro, pero después la cosa se complicó… pienso que por la falta de medicamentos, y murió", comenta Poli Santamaría, hermano de Sergio que falleció el pasado domingo 10 de febrero.
Sergio Santamaría estaba casado con una mujer de origen chileno y tenía tres hijos, dos de ellos residen en Venezuela y otro en Estados Unidos. Su hermano Poli asegura que lo único que pedía su hermano era que "le mandáramos medicinas porque con la comida se defendía. Los medicamento es muy complicado encontrarlos y comprarlos".