El objetivo de Paco Sanz era claro: quería engañar a la gente con una enfermedad inexistente para ganar dinero fácil. Su familia y su novia conocían la trama y apoyaban al supuesto enfermo en sus videos, visitas por los platós….
Aunque parece de película, lo cierto es que la trama es real y el artífice de todo esto fue descubierto tras derrumbarse la mentira de Nadia, otro caso que sirvió para levantar todo tipo de ampollas y que acabó con el ánimo de muchos a la hora de ayudar a personar enfermas.
En este caso, y gracias a El programa de Ana Rosa, se han podido comprobar como Paco Sanz llevaba a cabo un entramado de vergüenza en el que solo importaba una cosa: obtener dinero fácil y rápido por pena.
Tras reírse, cambiaba el semblante poniendo cara de pena con una actuación que incluso a su madre no parecía disgustarle, y mucho menos a su novia. En las grabaciones que han salido a la luz el presunto estafador aparece con un semblante serio y triste, mientras que otros trozos del video aparece riéndose y mofándose de aquellos que piquen en la trampa.
De esta manera, el enfermo de los 2.000 tumores se mofa con cortes de manga, chistes de mal gusto y comparte expresiones con su novia como "money, money", "tócame la faba" o "billetitos morados".
En un apartado del video se puede ver como Paco Sanz no tiene ningún tipo de escrúpulos a la hora de conseguir dinero. Es capaz de aprovechar un ingreso hospitalario para pedir una importante cantidad de dinero. La puesta en escena es perfecta, pero sus risas le delatan.
Los vídeos demuestran que Paco Sanz exageraba su diagnóstico médico y hacía creer a las víctimas que tenía una enfermedad terminal. "No acostumbro a llamar sinvergüenza a la gente, pero este señor lo es. Es un jeta y hace daño a mucha gente", comentaba Ana Terradillos.