Vísperas muy tensas al pleno en el Congreso de los Diputados sobre la corrupción política con el final de la instrucción de la primera parte del caso Gürtel que ha supuesto el final sorpresivo, e inesperado, de la carrera política de Ana Mato. Una gran atención a las reacciones a la hoja de ruta de Artur Mas y a las sonadas ausencia de representación de peso en el acto del Fórum de Barcelona, sobre todo las de La Caixa y Banco Sabadell.
Críticas también, y fue un asunto largamente debatido en las redes sociales -Twitter sobre todo, #anuncioFreixenet100– al nuevo anuncio de Freixenet. El presidente de la compañía, Josep Lluís Bonet, introdujo un mensaje de especial significado. "Conseguiremos el éxito si somos capaces de estar cien años más juntos", un brindis que tuvo su réplica por el lobby, muy activo, a favor de la independencia de Cataluña de España.
Sigue la controversia también en torno a la diputada autonómica de Izquierda Unida y aspirante a candidata a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Tania Sánchez, la novia de Pablo Iglesias, líder de Podemos. Insiste en defender la legalidad de su gestión durante su etapa como concejal en Rivas Vaciamadrid denunciando una campaña contra ella. Rechaza las informaciones de obtener un piso de protección oficial y venderlo a un compañero de partido así como de adjudicar un contrato a un hermano.
Asunto igualmente no cerrado el revuelo sobre el pequeño Nicolás. Los servicios secretos españoles, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), negó haberle encargado misiones. Este tema ha irritado al director del CNI, Félix Sánz Roldán. Puso en manos de la Abogacía General del Estado las declaraciones que hizo a Un tiempo nuevo, el programa que dirige Sandra Barneda en Telecinco, y que causaron enorme impacto mediático.
Con todo, el asunto central estuvo en la dimisión de Ana Mato, la ministra de Sanidad, que polarizó la atención política como destacó Hechos de Hoy. No hubo cese en esta tercera crisis en La Moncloa (las salidas anteriores de Miguel Arias Cañete y Alberto Ruiz-Gallardón). El caso Gürtel provocó la caída de quien era la colaboradora más próxima de Mariano Rajoy, clave en la campaña de las últimas elecciones generales, y amiga personal del presidente. Una lluvia de llamadas movió a Mariano Rajoy al carpetazo final porque la ministra quería seguir.
De nuevo la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, asume sus funciones. En las quinielas políticas se habló de una solución similar a la del ministro de Justicia, el relevo por la secretaria de Estado, Susana Camarero. No es una situación fácil. La tensión es ya abierta en el Partido Popular entre los sectores que lideran Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal.
