Dos edificios gemelos de 14 plantas construidos en 2008 y situados en el cruce de las avenidas General Avilés y Maestro Rodrigo, en el barrio de Campanar de Valencia, han ardido como una tea. El primer aviso del fuego se recibió sobre las 17.35 horas. El espectacular incendio se desató en la fachada de la tercera o cuarta planta y se extendió inmediatamente hacia los pisos de arriba, impulsado por el fortísimo viento de hasta 60 km/h.
Las llamas devoraron a gran velocidad primero un edificio y se extendieron casi de inmediato a la torre contigua. Desde varias terrazas, se podía ver personas pidiendo auxilio haciendo uso de las linternas de sus teléfonos móviles.
El 112 envió en un primer momento diez dotaciones de bomberos municipales, además de dos SAMU y un SVB. También se movilizaron unidades de Policía. Hacia las 19.30 horas se pidió ayuda a la UME. También se instaló un hospital de campaña. De momento, las llamas han dejado 13 heridos, entre ellos un niño, y seis de ellos bomberos que han tenido que ser ingresados.
Se vivieron momentos de gran tensión puesto que el fuego provocó una enorme columna de llamas y de humo negro visible desde todas las partes de la ciudad. Las cámaras de televisión se centraron durante toda la tarde en dos personas, un padre y su hijo, que se hallaban en uno de los balcones a la espera de ser rescatados.
El rescate se demoró durante más de una hora, mientras que los bomberos refrescaban constantemente el balcón hasta encontrar el momento en el que se pudo proceder a que padre e hijo saltaran a la cesta de la grúa de un bombero.
Hacia las ocho de la tarde la policía reunió a los vecinos para identificarlos. A esa hora no parecía que se echara a nadie de menos.
Una vez esté extinguido el incendio tendrán que entrar los técnicos y determinar en qué condiciones se queda el edificio, qué hay que hacer con él y que medidas de seguridad se requieren. Pero todos los vecinos de los 138 pisos afectados se han quedado sin casa y sin todos sus enseres y recuerdos de toda su vida.
Se ha habilitado un teléfono para personas afectadas: 690 167 830