Un enorme impacto que ha sacudido al PSOE como se reconoció a Hechos de Hoy.
El juez que investiga a Begoña Gómez por posible tráfico de influencias y corrupción en los negocios ha citado en calidad de testigo a Pedro Sánchez el próximo 30 de julio para que aclare las reuniones en Moncloa sobre la cátedra de su mujer, a dos de las cuales habría asistido. El juez acuerda que la prueba testifical se llevará a cabo según establece el artículo 413 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (Lecrim, por lo que se desplazará al despacho oficial del presidente del Gobierno de España en el Palacio de la Moncloa para tomarle declaración.
La prensa internacional reaccionó ante la citación como testigo de Pedro Sánchez en la causa contra Begoña Gómez.
Alberto Núñez Feijóo reclamó al Pedro Sánchez de 2024 que siga los consejos del Pedro Sánchez de 2017 y dimita. Advirtió al presidente que al ser citado como testigo tiene obligación de decir la verdad, “algo a lo que no está acostumbrado”.
Junta Directiva Nacional del PP
El jefe de la Oposición y presidente del PP exiió “explicaciones” a Pedro Sánchez tras ser llamado a declarar como testigo por el juez que investiga los “presuntas actuaciones de corrupción que llegan hasta La Moncloa”.
Consideró “realmente lamentable” que la primera vez que vayamos a oír a Sánchez hablar de la corrupción que afecta al Palacio de La Moncloa tenga que ser ante un juez porque ha sido llamado a declarar. “¡Vaya imagen de país!”.
Cree que “una ciudadana imputada puede acogerse a su derecho a no dar explicaciones, pero el Gobierno no”. “En lugar de rendir cuentas, pretende que los ciudadanos le rindan pleitesía”, denunció. Recordó que Sánchez, al declarar ante el juez en calidad de testigo, “tiene la obligación de decir la verdad, algo a lo que no está acostumbrado”.
Acusó al Gobierno de “mirar para otro lado” ante la situación migratoria, pese a que las comunidades autónomas llevan advirtiendo del “colapso” un año y cree que Sánchez recurre ahora a la “improvisación” porque busca “quitarse el problema de encima, no resolverlo”.
Advirtió que la posición del Gobierno sobre inmigración provocará “cronificar” esta crisis en lugar de “atajarla”, al tiempo que lamenta que Sánchez busque “descargar en las comunidades autónomas las responsabilidades que el Ejecutivo no ejerce”.
“Solidaridad sí, pero seguridad también”, afirmó Feijóo, quien defiende España como una “nación con valores” como el respeto a nuestra cultura, a nuestras creencias, a las mujeres, a los homosexuales y a la libertad de poder sentirse seguro en la calle.
Se preguntó por qué España es uno de los destinos preferidos por las mafias y exigió al Gobierno que se deje de “frivolidades” y se “tome en serio los problemas”.
Advirtió que el Partido Popular no va a “ceder ante ninguna presión ni gubernamental ni partidista ni mediática” porque está siempre “al servicio de los españoles”.
“Si quiere pactar con el PP, tendrá que recorrer el mismo camino que con sus socios, pero con una diferencia: las exigencias que nosotros ponemos sobre la mesa son de mero y simple sentido de Estado”, enfatizó, instando al Gobierno a ceder en vez de estar instalado en los desplantes continuos al principal partido de la oposición.
Hizo balance del primer año de legislatura de este Gobierno resumiéndolo en una Ley de Amnistía y una pretendida ley de censura “para adecuar la prensa a sus ocultaciones y mentiras”. Frente a ello, nada de presupuestos, nada de mejorar la vida de los ciudadanos y nada de soluciones, denunció Feijóo.
Sostuvo que, durante este año, otros partidos “han dado tumbos a diestro y siniestro” y han decidido “ser la oposición de la oposición”, prestándole indirectamente servicio a Sánchez.
Situó a los socios del PSOE “tan pendientes de ver satisfechas sus prebendas que han preferido hacer la vista gorda con todos los desmanes del Gobierno”. “Estos tumbos han de ser solo de ellos, pero no pueden condenar a la nación”, apuntó.
Cree que el Ejecutivo de Sánchez “ya no tiene remedio”, pero defiende que España sí lo tiene porque “hay otro camino” y “pronto habrá otro Gobierno”. “No hay que resignarse”, animó Feijóo, al tiempo que apostó por una España “con ambición, esperanza y soluciones””representada por el Partido Popular.
Reivindicó finalmente “la alternativa política sólida a la decadencia, a la parálisis, al conformismo y al egoísmo de Sánchez“.