El verdugo del número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, sumó en Canadá su primer título del año y logró su quinta victoria en dieciséis enfrentamientos ante Roger Federer, campeón de esta competición en el 2004 y el 2006 y finalista en el 2007 -superado por Djokovic– y en el 2010, cuando cayó ante el británico Andy Murray.

Tsonga aprovechó al máximo sus oportunidades. Rentabilizó la primera ocasión de rotura en el primer set para hacerse con la manga y no decayó a pesar de desperdiciar un punto de partido con 5-4 en el segundo set. Se mostró superior en el tie break y cerró el partido después de una hora y 47 minutos.

La celebración de la victoria por parte de Tsonga fue tremendamente medida por respeto a su rival, Federer.

Por su parte, Rafa Nadal, que sigue de baja por culpa de una lesión en la muñeca, ha reconocido este domingo su objetivo de participar en el Abierto de Estados Unidos. "Cuando tienes una zona inmovilizada durante un tiempo se pierde algo de musculatura y retomar la forma anterior lleva algo de tiempo. Todo estará muy justo, pero evidentemente lo intentaré", dijo Nadal este domingo.

"Voy a intentar entrenar lo mejor posible. Después, solo me queda esperar noticias de la semana que viene cuando vuelva a ir a Barcelona", explicó. "Entonces sabré si la lesión ha mejorado o si tengo que esperar un poco más. Si las pruebas demuestran que ha mejorado, después tendré que probar para ver cuánto me duele al golpear de revés", aseveró.

Además, Nadal mostró su preocupación por los plazos de recuperación de su lesión en la muñeca. "Si hay oportunidades de competir, evidentemente que tendré que forzar. Pero tenemos que tener en cuenta que el tiempo que nos queda es una semana y media. Eso no da mucho margen para forzar, y no podría hacerlo si veo que no puedo pegar un revés", aseguró.