Dudas de Evo Morales sobre su presencia en la toma de posesión de Luis Arce y su rápido regreso a Bolivia tras un año de exilio en México y Argentina. Expresó estas dudas a la emisora Kawsachun Coca del Chapare (centro de Bolivia).
Evo Morales se refugio primero en México y después en Argentina tras renunciar el 10 de noviembre de 2019 a la presidencia de Bolivia. Dimitió tras perder el apoyo de las fuerzas armadas en medio de denuncias de fraude electoral y fuertes convulsiones en el país.
Un sector de su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), desea que la toma de posesión de Luis Arce sea incluso un reconocimiento a su figura. Muchos militantes, y el ala moderada del MAS, sostienen en cambio que la presencia de Evo Morales sería un error en un momento de altas expectativas en torno a la figura de Luis Arce y el deseo mayoritario de impulso económico y político para lograr un clima de entendimiento en un país especialmente complejo y delicado.
Para los analistas, la esperanza suscitada en torno a Luis Arce como exministro de Economía y la polémica gestión de la presidenta interina Jeanine Áñez han influido en este vuelco electortal que resultó sorprendente en América Latina y especialmente en la región andina.
Luis Arce, como candidato del Movimiento al Socialismo (MAS), ganó con una diferencia de 26 puntos sobre el expresidente de centroderecha Carlos Mesa. Arce obtuvo el 55% de los votos frente a Mesa con el 28%.
A destacar en las recientes elecciones el error de las encuestas. Se produjo sobre todo porque fueron encuestas telefónicas que se proyectaron sbre trabajos políticos. Estos sondeos fracasarom estrepitosamente porque llegaron incluso a apuntar a un desenlace de empate entre ambos candidatos.
Para los analistas ha pesado especialmente en el resultado- Arce logró casi un millón más de votos que Morales– su gestión como ministro de Economía. El país espera que tenga un liderazgo decisivo ante la pandemia del coronavirus y su zarpazo económico.
También ha influido la decepción por la gestión de la presidenta interina Jeanine Áñez en los sectores indígenas y populares. Su mandato comenzó con la represión de las protestas de Sacaba y Senkata con más de 30 muertos y cientos de heridos. Fue crítica con los militantes del MAS y expresó sus reservas al “Estado Plurinacional de Bolivia” creado por la Constitución de 2009. Su gestió la mostró como una senadora de dureza y radicalidad en sus criterios políticos.
En el sorpresente resultado electoral pesó también con fuerza el error de la campaña de Carlos Mesa de no poner el foco en las clases bajas urbanas -decisivas- y apostar solo por las clases medias en contra del MAS. Luis Fernando Camacho dio además el golpe definitivo con una candidatura diferente dirigida al regionalismo de Santa Cruz, la región más próspera y con menos indígenas del país.