Las primeras consultas políticas del Rey Felipe VI han enviado las señales de que Mariano Rajoy será el primer candidato propuesto para someterse a la sesión de investidura. Pero también han mostrado las escasas posibilidades de éxito. Se puede abrir un escenario de consultas amplias y profundas, y de dificultad (ver en Hechos de Hoy, Felipe VI escucha todas las sensibilidades en un escenario de tensiones).

Para el Partido Popular estaría surgiendo la evidencia del desgaste del mandato de Mariano Rajoy, de que no existe un consenso total entre los conservadores sobre su liderazgo, y de que el mismo Rey constata que la única salida política pivota sobre un entendimiento profundo entre las primeras fuerzas. Hoy no existe.

Felipe VI recibió a Pedro Quevedo, de Nueva Canarias; a Isidro Martínez Oblanca, de Foro Asturias; y a Ana Oramas, de Coalición Canaria. Quevedo y Martínez Oblanca refejaron sus impresiones en el Congreso de los Diputados.

Quevedo señaló que ha sido al despedirse de él cuando el Rey ha mencionado que, en función de cómo se desarrollen los acontecimientos, era posible que tuvieran que volver a verse no tardando mucho. Explicó que ese segundo encuentro podría producirse porque el Rey abra una nueva ronda de consultas antes de proponer un segundo candidato a la investidura. O porque finalmente se tengan que convocar nuevos comicios.

En el balance del primer día de consultas, los diputados han dado pistas interesantes. Han sugerido que será Mariano Rajoy el primer candidato que proponga el Rey a partir del viernes. 

Quevedo y Marínez Oblanca destacaron la precisa información del Rey (una hora y 10 minutos la primera reunión y 56 minutos la segunda). Martínez Oblanca destacó además cómo el Rey "profundizó mucho en los entresijos del funcionamiento parlamentario". Y subrayó el perfil "analítico" de Felipe VI calificando la reunión de "cordial" y "afable". "Me he sentido a gusto", sentenció. Quevedo alabó por su parte, lo "responsabilizado" y "consciente" que ha encontrado al Rey de lo "endiablado" de este proceso.

El arranque de las consultas ha mostrado además la importancia que tendrá el fondo y la forma del discurso de Mariano Rajoy en la sesión de investidura, que será además fallida. Será el Partido Popular quien compruebe si hay coraje y pulso para su liderazgo o se abren nuevos escenarios.