Pablo Iglesias, el líder de la formación política Podemos, se sentó este domingo 28 de septiembre, frente a Risto Mejide, una reunión en la cumbre… bajo el cielo encapotado de Madrid.
En una azotea de Madrid, con un cielo nublado y gris, como en una canción de Joaquín Sabina, se citaron Pablo Iglesias y Risto Mejide. Un encuentro buscado desde hace tiempo por el presentador del programa para conocer al hombre que se esconde detrás de la leyenda de Podemos.
La pérdida de la privacidad, o como Pablo Iglesias expone, "imagina que tú y yo vamos a tomar una cerveza a un bar después. Pues esto ya no se puede hacer como antes. Y eso no es agradable", fue una de las reflexiones que abordó Pablo Iglesias en su conversación con Risto Mejide. Una charla en la que el mediático publicista no pasó por alto la particular imagen que Pablo Iglesias transmite en sus intervenciones televisivas.
"No es necesario estar cabreado para hacer política, pero en televisión me llevo unos palos tremendos. Es como muchas mujeres que entran en un bar y tienen a ocho babosos rodeándolas permanentemente. ¿Qué pasa, qué eres borde? No, es que me tengo que defender".
Risto, Pablo y Chester abordaron un viaje que transitó por variados temas, algunos más conocidos y otros menos habituales. Por ejemplo, la cuestión bancaria, sobre la que Pablo Iglesias se mostró contundente: "Resulta que los banqueros en este país, si gobierna el PP o gobierna el PSOE están encantados, pero como a la gente se le ocurra votar a Podemos, están preocupadísimos. Y los propietarios de los bancos deberían entender que por delante de su derecho a enriquecerse están los derechos de los ciudadanos. En este país el comportamiento del sistema financiero ha servido para que a mucha gente la echen de sus casas".
Además, Pablo Iglesias respondió al guante lanzado por el líder socialista Pedro Sánchez, quien le definió como populista. "A mí me parece bien que Pedro llame a Sálvame o que se vistan de otra forma… pero no basta. Nosotros tenemos una cosa que muchos critican, eso de que somos ciudadanos metidos en política o que no tenemos experiencia. Pues esa es la prueba de que somos de verdad".
No faltaron preguntas más comprometidas, como su famosa fotografía en la que se le ve conduciendo y hablando por el móvil: "Estoy lejísimos de ser un santo y si efectivamente me tienen que quitar los puntos, bien quitados están". También se refirió a su relación con la diputada Tania Sánchez (IU): "Es una de las personas de las que yo más he aprendido y a la que más admiro. Cuando uno está enamorado no está enamorado para convencer a su pareja de que piense igual que él".
Junto a defender y elogiar a Juan Carlos Monedero, habló a fondo de su noviazgo con Tania Sánchez, diputada por Izquierda Unida en la Asamblea de Madrid. Pablo Iglesias admitió que hablan mucho de política pero que hay un momento que se aburren y pasan a otras cosas. Pese a la presión de Risto con sus preguntas no quiso entrar en las opiniones de su novia sobre Podemos. Y se negó a desvelar sus planes y menos aún si será candidato en las elecciones generales. Tanto su rechazo a entrar en detalles como sus críticas a los empresarios decepcionaron a Risto que no logró una entrevista que estuviera a la altura de su encuentro la semana pasada con Joaquín Sabina -que Hechos de Hoy destacó-. A Risto le llamó además la atención que pese a hablar de amor lo hiciera con cara de enfado y se lo echó en cara.