Mantener relaciones sexuales con frecuencia y disfrutar de ellas pone a los hombres de más edad en mayor riesgo de ataques cardiacos y otros problemas cardiovasculares, pero para las mujeres mayores, el buen sexo puede, en realidad, disminuir el riesgo de hipertensión.
Ésta es una de las conclusiones de un estudio a gran escala de cómo el sexo afecta a la salud del corazón en la edad adulta, financiado por el gobierno estadounidense y publicado esta semana en Journal of Health and Social Behavior.
Estos hallazgos desafían la suposición generalizada de que el sexo trae beneficios uniformes para la salud de todos", subraya la líder del trabajo, Hui Liu, investigadora de la Universidad Estatal de Michigan, en Estados Unidos, que ha trabajado también con otros centros como la Universidad de Chicago.
Los participantes tenían edades entre 57 y 85 años cuando se recogió la primera oleada de datos en 2005-06 y se recogió otra ronda de datos cinco años más tarde. El riesgo cardiovascular se midió según la hipertensión, la taquicardia, la elevación de la proteína C reactiva y los eventos cardiovasculares generales: infarto de miocardio, insuficiencia cardiaca y accidente cerebrovascular.
Los hombres mayores que tenían relaciones sexuales una vez a la semana o más eran mucho más propensos a experimentar eventos cardiovasculares cinco años más tarde que los hombres que eran sexualmente inactivos, según los resultados del estudio.
Este riesgo no se encontró entre las mujeres mayores. "Sorprendentemente, encontramos que tener relaciones sexuales una vez a la semana o más pone a los hombres de más edad en riesgo de sufrir efectos cardiovasculares que es casi dos veces mayor que los hombres mayores que son sexualmente inactivos (subraya Liu).
Por otra parte, los hombres mayores que encontraban las relaciones sexuales con su pareja muy placenteras o satisfactorias tuvieron un mayor riesgo de eventos cardiovasculares que los hombres que no sentían tanto placer".
"Como los hombres mayores tienen más dificultades para alcanzar el orgasmo por razones médicas o emocionales que sus homólogos más jóvenes, pueden esforzarse hasta mayor grado de agotamiento y crear más tensión en su sistema cardiovascular con el fin de alcanzar el clímax", argumenta.
Los niveles de testosterona y el uso de medicamentos para mejorar la función sexual también pueden desempeñar un papel. "A pesar de que la evidencia científica es aún poco frecuente, es probable que la medicación sexual o los suplementos tienen efectos negativos sobre la salud cardiovascular de los hombres de más edad", apuntó.
– Ver en Hechos de Hoy: Trucos para lucir un aspecto fresco sin haber descansado