"Esta mañana (martes 29), Consejo de Ministros. El Gobierno en funciones seguimos cumpliendo con nuestra obligación", el tuit de Mariano Rajoy. Dispuesto a liderar de manera eficaz un gobierno en funciones el tiempo que sea necesario y a mantener amplias conversaciones, con talante abierto, para construir pactos y consensos (ver en Hechos de Hoy, Pulso de hierro en Comité Federal y ¿un escenario sin Rajoy ni Soraya?)
Mariano Rajoy preside la última reunión del Consejo de Ministros del año y la primera del Gabinete en funciones tras las elecciones generales. Se celebra en medio de las negociaciones para la investidura. En su agenda aprobar medidas como la subida del 1 por ciento del salario mínimo para 2016.
Tras las elecciones, el Consejo de Ministros sigue reuniéndose cada semana, pero la pasada no lo hizo debido a las fiestas navideñas y Mariano Rajoy citó a sus ministros para este martes 29 con el fin de dar trámite a diversas medidas que tienen que ser aprobadas antes de fin de año.
Sobre la situación política y las expectativas abiertas, el Partido Popular sigue apostando por un gobierno de certidumbres, moderación y centralidad en beneficio del interés general. Es la tesis y la hoja de ruta de Mariano Rajoy. En el análisis que se hace se asegura que los españoles no votaron -ni se merecen- coalición oportunistas con partidos extremistas ni independentistas.
Los ejemplos son Alemania con las grandes alianzas -la gran coalición– entre los democristianos de la CDU y los socialdemocrátas del SPD en 1066, 2005 y 2013. Y también el ejemplo de Francia con el acuerdo republicano contra el extremismo del Frente Nacional. En La Moncloa se subraya cómo los socialistas en las últimas elecciones regionales de este 2015 retiraron a los candidatos que no tenían opciones en beneficio del partido de Nicolas Sarkozy para que no ganara el Frente Nacional.
Alemania y Francia, dos espejos de moderación, centralidad y responsabilidad para España, un país que está en el corazón del núcleo duro de la Eurozona y de la Unión Europea. Es el balance que quiere enfatizar Mariano Rajoy en este final de 2015.