Especial atención, en los hechos de hoy, de Alberto Núñez Feijóo a las sesiones de investidura en Extremadura y Comunidad Valenciana.
El ya presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, y la hasta este viernes candidata a la Presidencia de la Junta de Extremadura, María Guardiola, han escenificado frente a su socio Vox su sólido compromiso en la lucha contra la violencia machista al tiempo que han anunciado que asumirán directamente las competencias en materia de Igualdad. Los dos barones del PP han hecho sus anuncios en los debates de investidura celebrados este jueves y que en el caso de Extremadura continua este viernes.
La reacción de Feijóo al CIS
Por su parte Alberto Núñez Feijóo, en su mitin de Burgos, pidió “trabajar sin descanso” para unir el “voto de cambio” en el Partido Popular porque “si nos movilizamos, ganamos”.
Recirdó que “quedan 10 días para pasar página del sanchismo” y que ya ha comenzado “la cuenta atrás” para traer “el cambio a España“, que ahora “tiene un Gobierno que no está a su altura”.
Señaló que el sanchismo es”“pactar con quien sea para llegar al poder de la forma que sea y mantenerse como sea”.
Aseguró que el sanchismo ha venido “a intoxicar” la convivencia de España y a “inaugurar una etapa en la que aquellos que no creen en España son quienes gobiernan España”.
Tachó de “provocación” decir que la economía va como una moto cuando España ha sido “penúltima” en la recuperación del PIB pre pandemia y líderes en paro e incremento de deuda.
Calificó de “indignante” que el Gobierno se considere a sí mismo como feminista cuando “ha puesto a 120 violadores en la calle y ha rebajado las penas a más de 1.200” con la Ley del Solo sí es sí”.
Cree que las declaraciones de los líderes de Bildu que pretenden dar “lecciones de respeto a las víctimas” son “impresentables” y “directamente insoportables”, sobre todo tras incluir a asesinos en las listas de las elecciones municipales.
Contraouso al Partido Popular, que está “en la calle y con la gente”, con Sánchez, que lleva “cuatro años alejado y de espaldas” a los españoles, que “ahora le dan la espalda a él”.
Aseguró que “lo que no cambia” en la campaña del PSOE es el “insulto constant”” y auguró que “ningún cambio en la campaña del sanchismo” reducirá el “deseo de cambio” de los españoles.
Pidió el voto al PP para “recuperar el respeto y la cordialidad” y para que España pueda tener un Gobierno en el que se pueda “confiar”.
Aseguró que “si la gran mayoría de españoles” que quieren cambio votan al PP “nada ni nadie” podrá interrumpir o bloquear ese cambio
• Reconoce querer ganar las elecciones y asegura que va a ser “el próximo presidente del Gobierno de España” para traer “un Gobierno que funcione”.
Recordó que para que gobierne Sánchez es suficiente con “no votar al PP” porque en algunas provincias, como Burgos, el voto a otros partidos se puede perder.
Concluyó pidiendo movilización porque “es mejor perder un día de piscina que cuatro años de Gobierno” sanchista, manejado por “aquellos que no creen en España”.