A su regreso de Cuba -y tras suscribir el llamado Pacto de La Habana-, Nicolás Maduro fustigó a la oposición criticando al portavoz de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo. Tachó a la oposición de “necrofílica” y cargó con dureza contra la emisora Radio Caracol de Colombia y el diario ABC de España -el periódico de cabecera del grupo Vocento– por" faltar al respeto a Chávez y sus hijas y publicar informaciones malintencionadas".
Junto alas declaraciones de Maduro a la cadena Telesur, y su intervención a su regreso sorpresivo de La Habana, en Caracas el Gobierno reconoció que el presidente sufre ahora inflamación abdominal. Admitió que padece una "insuficiencia respiratoria" derivada de la "severa infección pulmonar" tras la última operación.
En Washington, la posición de la Administración de Barack Obama es de cautela. Estados Unidos confirmó los contactos mantenidos por altos funcionarios de la Administración con el vicepresidente, Nicolás Maduro. La portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, los enmarcó en un acercamiento muto, impulsado por ambas partes, con el fin de recuperar la normalidad diplomática entre los dos países. Para analistas en Caracas, según informaciones de Hechos de Hoy, Barack Obama mantiene la misma posición de Dilma Rousseff de prudencia y cautela en estos momentos aunque tanto Washington como Brasilia esperan que si Chávez no asume su nuevo mandato se celebren nuevas elecciones tal como marca la Constitución de Venezuela.
La declaración de Villegas
En Caracas, el ministro de Comunicación, Ernesto Villegas, anunció que el presidente Hugo Chávez, tiene problemas respiratorios a causa de una "severa" infección pulmonar.
"El comandante Chávez ha enfrentado complicaciones como consecuencia de una severa infección pulmonar", dijo Villegas, en el último parte médico sobre el estado de salud del presidente. "Esta infección ha derivado en una insuficiencia respiratoria que requiere del comandante Chávez un estricto cumplimiento del tratamiento médico", señaló.
Además rechazó las críticas de la oposición y las informaciones en las redes sociales. En la misma línea marcada por Maduro, Villegas ha condenado la "guerra psicológica" sobre la salud de Chávez que tiene como "fin último" desestabilizar al Gobierno de Venezuela y "acabar con la revolución bolivariana". Villegas recalcó la "férrea unidad del Gobierno" en torno a Chávez.
