Lilian Tintori, la esposa de Leopoldo López, encarcelado de forma cruel por Nicolás Maduro, se convirtió en la heroína de una jornada histórica en Venezuela.
Al acudir a votar en las elecciones legislativas proclamó que "el cambio ya inició" pidiendo a los ciudadanos que "salgan a votar masivamente, el voto es secreto y va a abrir las puertas del cambio". Proclamó que "el amanecer del día 7 va a ser un día de alegría". "Vamos a ver la libertad de todos los presos políticos", dijo llena de esperanza reivindicando el derecho de su marido a votar.
"Vamos a lograr en los primeros 6 meses de 2016 un cambio profundo", dijo ante un eventual triunfo de la oposición en los comicios, algo vaticinado por la mayoría de las encuestas, incluso aquellas cercanas al chavismo. Casi todos los sondeos pronostican un triunfo de cerca de 30 puntos de la oposición sobre el oficialismo.
"La gente es la que decide, la que va a decidir el destino de una nueva Asamblea. Todos deseamos y merecemos un cambio. Espero el inicio de un cambio. Queremos cambiar el odio por el amor, la injusticia por la justicia y la violencia por la paz" fue el mensaje de Lilian Tintori, la verdadera heroína, la madre que se ha sobrepuesto a todos los sufrimientos y la convertido la causa de la libertad de su marido en la de los derechos humanos y la dignidad en Venezuela.
En Caracas hay todo tipo de especulaciones sobre los próximos días en un momento de primer plano para la unidad de la oposición en la coalición Mesa de Unidad Popular (MUD): Henrique Capriles (Primero Justicia); Leopoldo López (Voluntad Popular) (condenado a 14 años 14 años de prisión); Antonio Ledezma (Alianza Bravo Pueblo) (en arresto domiciliario); y Jesús Torrealba (coordinador de las fuerzas opositoras).
En estos comicios, con 19,5 millones de ciudadanos convocados en las urnas, se renueva la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) de 167 escaños. Esta es la primera vez que la oposición a la llamada Revolución Bolivariana iniciada en 1999 por Hugo Chávez (1999-2013) llega como favorita. La alta tasa de inflación, recesión y escasez de bienes básicos, el marco de estos comicios.
En la escena general del Caribe, el régimen de Raúl Castro ha buscado esta vez un cierto distanciamiento en unas elecciones que, al margen de los resultados, han mostrado el derrumbe del liderazgo de Nicolas Maduro. Como apuntaron analistas a Hechos de Hoy, Raúl Castro no quiere empañar la figura de Fidel Castro en las sordas luchas de poder de Caracas en el chavismo donde a la política se suman las tramas de narcos y una corrupción política y moral sin precedentes.