Noticia de impacto político y económico, por la personalidad única de Miguel Boyer como se destacó a Hechos de Hoy entre las primeras personas que acudieron a dar su pésame a la familia y mostrar su solidaridad.
Una Isabel Preysler desolada abandonó hacia las dos de la tarde la clínica Ruber Internacional de Madrid, donde unas horas antes falleció su marido, el exministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer. En un coche con los cristales tintados, Isabel salió de la clínica donde en los primeros momentos estuvo arropada por sus hijas Ana Boyer y Tamara Falcó, además de por su madre, Beatriz.
Isabel había ingresado a Miguel a primera hora de la mañana en estado crítico quien poco más de una hora después falleció a causa de una embolia pulmonar. "Don Miguel Boyer Salvador ha ingresado por urgencias en el día de hoy en estado crítico, causado por un tromboembolismo pulmonar. El fallecimiento se ha producido una hora después de su ingreso", señaló el comunicado realizado por la clínica a petición de la familia.
Una de las primeras personas en acudir a la clínica para dar personalmente su pésame a Isabel y sus hijos fue el exministro Carlos Solchaga, muy afectado por la noticia. "La viuda, como es natural, está muy afectada porque, además, esto ha sido cosa de las últimas horas, de manera que esta misma mañana cuando se ha despertado parecía respirar con tanta dificultad que ha tenido que venir inmediatamente aquí", confirmó Solchaga ante los periodistas que se congregaron a las puertas del hospital.
Por parte del Gobierno de Mariano Rajoy, la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, reconoció la labor de Miguel Boyer por su contribución a la "modernización y apertura de la economía española".
El 28 febrero de 2012 Miguel Boyer sufrió un derrame cerebral de noche, en su cama. Isabel Preysler actuó con celeridad y le ingresó de urgencia en la clínica Ruber en el barrio de Salamanca de Madrid donde permaneció recuperándose durante más de dos meses. Después, continuó su rehabilitación tanto en casa como en una clínica especializada pero nunca se recuperó totalmente de sus problemas de movilidad y de habla.
El cuerpo Miguel Boyer será velado en el tanatorio Parque San Isidro de Madrid, donde se espera gran afluencia de familiares y amigos del matrimonio para expresar sus condolencias.