El presidente Joe Biden lanzó el objetivo de que todos los trabajadores y contratistas federales deberán vacunarse. El presidente busca un plan de choque para frenar la propagación de la variante delta. La Casa Blanca ha constatado que se está poniendo en peligro la recuperación de la economía de la nación.
El Departamento de Defensa, el Departamento de Asuntos de Veteranos, el Servicio de Salud Indígena y el Instituto Nacional de Salud ya han dicho que requerirán vacunas para sus 2,5 millones de empleados.
Esta iniciativa se produce antes de un nuevo discurso de Joe Biden a la nación con un plan de seis ejes para abordar el último aumento en los casos de coronavirus y el ritmo estancado de las vacunas contra la COVID-19.
"Va a basarse en los requisitos de nuestros mandatos, para que los trabajadores del gobierno federal u otros tengan que vacunarse, hemos visto que funciona”, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, en MSNBC.
“No podemos declarar con una varita mágica del gobierno federal que todas las personas deben vacunarse, los distritos escolares pueden hacer eso, los líderes y los estados pueden presionar a sus distritos escolares para que hagan eso, eso es importante, las empresas pueden hacer eso y lograr que requisitos para sus empleados “, señaló. “Eso es algo que han hecho algunas empresas más grandes, y eso es un modelo".
