El papa Francisco oró este Domingo de Ramos en la Plaza de San Pedro de Roma por las víctimas de los dos atentados en iglesias coptas egipcias. La matanza se produce a tres semanas antes de la visita del Papa a Egipto.
El número de víctimas mortales asciende a 27 y hay además 80 heridos tras explotar un terrorista suicida dentro de una iglesia en la ciudad de Tanta, en el norte de Egipto, mientras se celebraba la misa del Domingo de Ramos que da inicio a la Semana Santa. La masacre ocurrió en la iglesia de Mar Girgis (San Jorge) en la ciudad del delta del Nilo, a unos 100 kilómetros al norte de El Cairo. Se trata de la iglesia cristiana más grande de la región.
En el momento del atentado la iglesia se encontraba prácticamente llena. Las fuerzas de seguridad acordonaron la iglesia y buscaron más artefactos explosivos, según informó el Ministerio del Interior.
Poco después, se produo otro atentado suicida en una iglesia copta en Alejandría que causó al menos 18 muertos y unos 70 heridos, según la televisión estatal egipcia. Esta segunda explosión ha tenido lugar durante un acto religioso presidido por el Papa de la Iglesia copta, Teodoro II, que ha resultado ileso. Los atentados se producen después de varias amenazas de Estado Islámico contra la comunidad cristiana de Egipto.
Los cristianos coptos constituyen en torno al 10% de la población egipcia de unos 94 millones de habitantes. Por lo general, la comunidad cristiana convive pacíficamente con la mayoría musulmana del país. Sin embargo, el pasado mes de diciembre, en un grave atentado con bomba en una iglesia junto a la principal catedral de El Cairo murieron 30 personas en un acto reivindicado por Estado Islámico.