Edmundo González Urrutia abandonó el sábado Venezuela volando rumbo a España, país que le ha concedido el asilo político.
El sábado por la mañana, el presidente electo mantuvo una reunión con diplomáticos españoles. La situació era insostenible según informaciones de Hechos de Hoy. Edmundo se había ido refugiando de cada en cada. A punto estuvo de ser detenido varias veces. Existía gran preocupación en su familia.
A su edad, 75 años, preocupaba su detensión y su tortura. El durísimo régimen al que son sometidos los presos políticos hubiera supuesto su muerte. Finalmente Edmundo solictó formalmente asilo político en España para él y su mujer. Pero antes dejó un mensaje para la nación. Su sueño de libertad y cambio será ahora más fuerte desde Madrd.
Por su parte María Corina Machado ha instado al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y a la vicepresidenya, Kamala Harris, a hacer más por Venezuela en horas críticas. Y a no permitir una tiranía tras el mayor fraude electoral cometido en la historia moderna de América Latina.
El sábado, con los salvoconductos para llegar al aeropuerto y marcharse del país sin ser detenido por las autoridades, un avión militar español esperaba en República Dominicana para trasladarle a Madrid.
La vicepresidenta Delcy Rodríguez anunció la salida del país del presidente electo. El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, dijo que la salida de Venezuela del presidente electo se produce a petición suya, no a iniciativa española.
Antes de viajar, Edmundo estaba acogido ya en la residencia del embajador español en Caracas. El cerco al que las fuerzas de seguridad de Maduro habían sometido a la embajada de Argentina fue una señal clara, tanto para el presidente electo como para los diplomáticos españoles, de que no hay refugio seguro ahora mismo en Venezuela.