Cuatro preguntas claves ante la votación en las primarias del Partido Republicano en Carolina del Sur:
— Salvo una gran sorpresa, la mayoría de los debates sobre las primarias se enfocaron sobre el margen de victoria de Trump. ¿Existe una línea roja que podría hacer que Haley reconsidere su plan de permanecer en la carrera independientemente del resultado?
Haley y su campaña -como ha informado Hechos de Hoy– han rechazado repetidamente cualquier sugerencia de poner fin a su candidatura antes del próximo mes. Pero Haley no sería la primera candidata en cambiar de opinión cuando se afronten cifras demoledoras-
— Unas primarias abiertas. Gran parte de lo que convirtió a Haley en una figura política nacional, como su llamamiento como gobernadora a retirar la bandera de batalla confederada de los terrenos de la Cámara estatal, es anatema para la base conservadora del Partido Republicano del estado.
Las primarias en Carolina del Sur están abiertas, lo que significa que los demócratas y los independientes pueden votar en la carrera republicana. Haley espera que la naturaleza de vida o muerte del momento inspire un arrebato tardío anti-Trump. Uno que podría extenderse a otros estados con primarias abiertas, como Michigan la próxima semana y Texas y Virginia el Supermartes.
— ¿Puede Trump ampliar su base?: Una de las principales preocupaciones que enfrenta la campaña de Trump (una que Haley destacó en el período previo a Carolina del Sur) es su débil desempeño entre los independientes, que fue evidente en New Hampshire.
Dado que a los independientes también se les permite votar en la contienda de Carolina del Sur, podríamos tener una idea de si Trump ha hecho algo para ayudar a su causa entre estos potenciales votantes indecisos en las elecciones generales.
— A pesar de todos los argumentos especulativos y de establecimiento de expectativas, todavía hay una sola medida concreta de éxito: los delegados. El eventual nominado necesitará 1.215 de ellos.
Trump actualmente lidera a Haley, 63 a 17. Obviamente no es insuperable, y con 50 en juego en Carolina del Sur, Haley, en teoría, podría tomar la delantera. Sin embargo, es mucho más probable que quede excluida por completo. Carolina del Sur otorga 29 de sus delegados al ganador estatal y tres cada uno al líder en cada uno de sus siete distritos electorales.