Empezó el amplio plan de Joe Biden en Oriente Medio con el primer objetivo de no atacar a Irán en su yerritorio pero sí castigar a sus bases en Irak y Siria explicaron fuentes militares a Hechos de Hoy. La Casa Blanca quiere poner coto a la progresiva influencia de Irán en toda la región.
“Esta tarde, bajo mi dirección, las fuerzas militares estadounidenses han atacado objetivos en instalaciones de Irak y Siria que el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán y milicias afiliadas utilizan para atacar a las fuerzas estadounidenses”, anunció el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en un comunicado a la nación.
“Estados Unidos no busca el conflicto en Oriente Medio ni en ningún otro lugar del mundo. Pero que sepan esto todos aquellos que intenten hacernos daño: si dañan a un estadounidense, responderemos”,subrayó Biden.
Por su parte el Comando Central de Estados Unidos (Centcom) confirmó ataques aéreos en Irak y Siria contra la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán y grupos de milicias afiliados. Las fuerzas militares estadounidenses atacaron más de 85 objetivos, con numerosos aviones, incluidos bombarderos de largo alcance pilotados desde Estados Unidos. En los ataques aéreos se emplearon más de 125 municiones de precisión, explicó el Centcom.
“Las instalaciones atacadas incluían centros de operaciones de mando y control, centros de inteligencia, cohetes y misiles, y almacenes de vehículos aéreos no tripulados, así como instalaciones logísticas y de la cadena de suministro de municiones de los grupos milicianos y de sus patrocinadores de los Guardianes de la Revolución Islámica de Irán que facilitaron los ataques contra las fuerzas de Estados Unidos y de la coalición”.