Nuevo disgusto para el tenista español. Carlos Alcaraz cayó eliminado este miércoles en octavos de final del torneo de Shanghái (China), penúltimo Masters 1.000 de la temporada, ante el búlgaro Grigor Dimitrov (5-7, 6-2 y 6-4), en un partido con muchas dudas de Carlitos.
“Con esta derrota, el número uno está un poco más lejos. Va a ser más difícil. Quedan algunos torneos y trataré de hacerlo lo mejor posible, de ganarlos, si quiero tener la oportunidad de terminar el año como número uno. He perdido muchas oportunidades para conseguirlo”, lamentó Alcaraz al finalizar el partido. Trabajaré en algunos errores, algunos pensamientos, puntos que tengo que trabajar”, analizó.
El número dos del mundo nunca dominó a Dimitrov, número 19 del ránking ATP, que sí supo gestionar mejor sus ventajas y tuvo más confianza en los momentos claves. Alcaraz se adjudicó la primera manga con una remontada justo a tiempo, pero no pudo hacer nada ante la versión agresiva y contundente de un tenista búlgaro con las ideas muy claras que venció por primera vez ante el español, después de tres derrotas previas, en las que no había convertido ningún set.
Por primera vez esta temporada, el español no alcanza, al menos, los cuartos de final de un Masters 1.000, después de que cayera en esa misma ronda -aunque con menos partidos jugados- en el torneo disputado en Roma. Esta derrota niega el número uno a Alcaraz, que no podrá superar a un Novak Djokovic que ahora posee unos 500 puntos de colchón.
El español arrancó firme con su servicio, mientras que el búlgaro, con algo de dudas en forma de dos dobles faltas en su primer saque, prefirió evitar el juego desde el fondo para salvar los dos primeros puntos de break para el español y mantener la igualdad. Ambos tenistas subieron su nivel con sus saques sacando los dos siguientes juegos en blanco, con un Dimitrov creciendo y frenando el ímpetu inicial de Alcaraz.
De hecho, en la primera oportunidad que tuvo para romper al español, puso el 2-3, aprovechando errores de un Alcaraz que sufría más y algo más dubitativo. El búlgaro confirmó el break con su servicio y ahondó en las malas sensaciones del español al resto, sufriendo a un Dimitrov más entero, con más confianza y golpes más efectivos y certeros.
Con 3-4 y 0-30 para Alcaraz, este no aprovechó su valiosa opción de optar al empate, pero Dimitrov, al que le salía todo, volvió a tirar de saques directos para neutralizar la fe del murciano y poner el 3-5. A partir de ahí, Alcaraz mejoró su actitud y trabajó la remontada, con un despliegue de todo tipo de golpes que contuvo al búlgaro y le permitió cerrar al resto, aunque en la segunda bola de set, y ganando tres juegos seguidos, la manga por 7-5.
Ese final aciago de Dimitrov no le hundió, y comenzó el segundo set rompiendo al español en el primer juego y con un sólido servicio se puso 0-2. De nuevo, a Alcaraz le tocó remar, y lo hizo para respirar con el 1-2 gracias a un sólido y cómodo servicio. Pese a algún golpe ganador pero aislado de Dimitrov, el español se mantuvo con vida gracias a sus servicios, sin perder los nervios, aunque un juego abajo (2-3).
Pero el búlgaro ya había metido la directa para adjudicarse el segundo set -el primero en el cara a cara ante Alcaraz– y no dio tregua ante un desconectado Carlos con un doble break que confirmó con su saque para poner su nombre a la primera al segundo set (6-2).
Ya en la tercera manga, el búlgaro mantuvo su alto nivel para romper el servicio del español en el tercer juego, un rotura que confirmó en su siguiente saque cómodamente. También fácil, Alcaraz, con paciencia, se mantuvo cerca con un juego en blanco, ante un Dimitrov que seguía llevando la iniciativa y gestionaba mejor técnica y mentalmente su ventaja.
Con saques amplios y un revés cortado que desesperó al murciano, que nunca se metió mentalmente en el tercer set, el búlgaro cerró (6-4) con su servicio el tercer y definitivo set para avanzar a cuartos de final. Ahora, Dimitrov se verá las caras en cuartos de final con el chileno Nicolás Jarry.