Ha sucedido tras meses de fuertes tensiones políticas y bloqueo judicial. El Tribunal Supremo de Estados Unidos, en decisión tomada de forma unánime, levantó la suspensión del veto migratorio.
Ha permitido que se aplique a todos los ciudadanos de Irán, Libia, Somalia, Siria, Sudán y Yemen que no tengan un vínculo sólido y creíble con "una persona o entidad de Estados Unidos".
"Es una clara victoria de nuestra seguridad nacional. Como presidente no puedo autorizar la entrada en nuestro país de quienes nos quieren hacer daño", afirmó Donald Trump en un comunicado.
El Tribunal Supremo comunicó que escuchará los argumentos a favor del veto migratorio de la Administración Trump a partir de octubre. Anunció también que permite la puesta en práctica de la mayoría de sus puntos al menos durante los próximos seis meses.
El anuncio supone una victoria para el presidente de Estados Unidos. Reduce el alcance de las resoluciones de los tribunales inferiores Habían declarado nulo el veto migratorio decretado por Donald Trump para impedir la entrada en el país de personas procedentes de seis países de mayoría musulmana.
Las sentencias del Tribunal Supremo tienen carácter de ley en Estados Unidos. Por lo que una resolución definitiva favorable a Donald Trump sentaría bases legales para permitir al presidente legislar sobre inmigración cuando la "seguridad nacional" corra peligro, tesis en la que se basó la defensa del veto migratorio.
El Tribunal Supremo ha respondido también favorablemente a la petición de la Administración para que el decreto entre en vigor mientras se instruye el proceso legal, por lo que permitirá la aplicación parcial del veto durante 120 días.