La presidenta de la Junta de Andalucía en funciones, Susana Díaz, celebra este lunes y martes su última ronda de reuniones con los dirigentes de los partidos con representación parlamentaria con el objetivo de desbloquear su investidura.
En el caso de que no fuera posible el acuerdo, habría que aplicar el Estatuto de Autonomía y, en consecuencia, se convocarían nuevas elecciones.
Susana Díaz recibe a los dirigentes de los partidos en el Palacio de San Telmo (sede de la Presidencia de la Junta) por orden de mayor a menor número de diputados -PP-A, Podemos, Ciudadanos e IULV-CA- y cierra la ronda de encuentros el PSOE-A, que fue la formación más votada en las pasadas elecciones autonómicas del 22 de marzo. Susana Díaz ya mantuvo reuniones con los dirigentes de los partidos días después de las elecciones para abordar la investidura.
Los contactos que el PSOE-A ha llevado a cabo con los demás partidos con posterioridad no han dado resultado y en las tres votaciones de investidura que se han celebrado hasta ahora en el Parlamento, la última el pasado 14 de mayo, Susana Díaz ha contado con el voto en contra de PP-A, Podemos, Ciudadanos e IULV-CA.
Han pasado ya 80 días esperando la constitución de un nuevo gobierno. Esta situación, como apuntó Hechos de Hoy, no tiene precedentes en la historia de la democracia