Estalló una gran crisis en Asia Central cuando Vladimir Putin menos lo esperaba. Sucede en un momento en que las unidades de élite de Rusia están preparadas para la operación relámpago de ocupar totalmente Polonia.

Una alianza militar liderada por Rusia envió tropas para ayudar a sofocar los disturbios en Kazajistán. Decenas de personas murieron al intentar asaltar edificios gubernamentales.

Considerada durante mucho tiempo como una de las repúblicas ex soviéticas de Asia Central más estables, Kazajistán, rica en energía, se enfrenta a su mayor crisis en décadas después de días de protestas por el aumento de los precios del combustible que provocaron disturbios generalizados.

Bajo una presión cada vez mayor, el presidente Kassym-Jomart Tokayev, llamó a la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), una versión rusa de la OTAN.

Bielorrusia, Armenia, Kazajistán, Kirguistán y Tayikistán, además de Rusia, forman esta alianza para combatir lo que llamó “grupos terroristas” que supuestamente habían “recibido una amplia formación en el extranjero”.

Vladimir Putin y su ministro de Defensa, Sergei Shoigu supervisan de forma directa esta crisis.

En cuestión de horas, la alianza dijo que se habían enviado las primeras tropas, incluidos paracaidistas rusos y unidades militares de los otros miembros de la OTSC, en su primera acción conjunta importante desde su fundación en 1999.

Oficialmente, el número de fuerzas de mantenimiento de la paz de la OTSC asciende a 3.600, pero no se especificó cuántas tropas serán enviadas a Kazajistán. Armenia dijo que envió 70 soldados.

Desde Rusia, el contigente incluía unidades de las tropas aerotransportadas. Las imágenes publicadas por el Ministerio de Defensa ruso mostraron aviones de transporte militar cargados con soldados y camiones blindados antes de despegar de una pista nevada hacia Kazajstán.

Según FlightRadar 24, al menos dos aviones de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas se dirigieron a Kazajstán. Los aviones Il-76D y An-124 despegaron de Moscú.

Según medios rusos, este jueves las unidades avanzadas del contingente ruso ya han comenzado a cumplir con las tareas asignadas.

Las Tropas Aerotransportadas de Rusia (VDV) son la fuerza militar rusa con mayor capacidad de movilidad y la mayor fuerza aerotransportada del mundo, con unos 72.000 efectivos.

La tarea las Tropas Aerotransportadas es la de responder en tan solo unas horas a una posible situación de emergencia, utilizando aviones de largo alcance para realizar un asalto paracaidista pocas horas después del aviso.

A diferencia de las unidades aerotransportadas occidentales, que deben desplazarse a pie una vez llegadas a su destino, cada división de las VDV está mecanizada con 200 a 300 vehículos de combate blindados de la familia BMD, con capacidad para ser lanzados en paracaídas. Esto permite a las unidades de las Tropas Aerotransportadas tener una mayor movilidad y una potencia de fuego superior a la de la infantería ligera convencional.

Las VDV suelen considerarse como una fuerza de élite debido a que sus miembros son seleccionados individualmente entre voluntarios según criterios de condición física e inteligencia, además de recibir un entrenamiento más riguroso que el resto de las Fuerzas Armadas.

Con la caída de la Unión Soviética el número de divisiones de las VDV pasó de siete a las cuatro que tiene hoy. Los rifles de dotación de las Tropas Aerotransportadas son el AKS-74 y su versión modernizada, el AK-74M. Otros fusiles utilizados por las VDV son el AKS-74U, el AK-47S y el AKMS. Todos estos fusiles cuentan con una culata plegable, lo cual facilita su uso y transporte en espacios reducidos y al realizar saltos en paracaídas.

La primera vez que la Unión Soviética hizo uso de tropas aerotransportadas en una acción de combate fue en 1929, cuando quince paracaidistas del Ejército Rojo aterrizaron en la ciudad tayika de Garm para sofocar un levantamiento ocurrido en la región del Turquestán.

Desde entonces, esta fuerza protagonizó los principales conflictos en los que participó la Unión Soviética, como la Segunda Guerra Mundial y la guerra en Afganistán y, posteriormente, la Federación Rusa, sobre todo en los conflictos en Chechenia.

En 2020, para celebrar el 75 aniversario de la victoria en la Segunda Guerra Mundial (Gran Guerra Patria, en Rusia) y al 90 aniversario de la formación de las tropas aerotransportadas el personal militar de las Fuerzas Aerotransportadas, realizó el primer salto en paracaídas del mundo HALO (Gran altitud-Baja apertura) desde el borde inferior de la estratosfera ártica, a 10 kilómetros de altura.

La fuerza rusa utilizó un “sistema de paracaídas de propósito especial de próxima generación”, equipo de oxígeno probado por el ejército, dispositivos de navegación, equipo especial y uniformes. El coronel general de las Fuerzas Armadas rusas Andrey Nikolaevich Serdyukov es el actual comandante de las tropas aerotransportadas rusas.

Las fuerzas rusas participarán así en la intervención de las “fuerzas de paz” que el actual presidente de la OTSC, el primer ministro armenio Nikol Pashinyan, anunció alegando que Kazajstán enfrentaba una “interferencia externa”.
Leonid Kalashnikov, Jefe del Comité de Asuntos de la Comunidad de Estados Independientes del parlamento ruso, dijo que las “fuerzas de paz” de la OTSC solo protegerían la infraestructura y las instalaciones locales.

Sin embargo, el funcionario ruso agregó que las fuerzas de la OTSC permanecerían allí por un período de tiempo indefinido, “hasta que la situación se estabilizara”.

Mientras tanto, el presidente kazajo Tokayev, no ha logrado hasta ahora sofocar las protestas, a pesar de concesiones sobre los precios del gas, de la dimisión del gobierno y de la introducción del estado de emergencia y el toque de queda nocturno en el país.

El jueves, la policía informó de que “decenas” de manifestantes habían muerto cuando intentaban tomar edificios administrativos y comisarías. El ministerio de Salud indicó de que había más de mil heridos, entre ellos 62 en cuidados intensivos.

Además 13 miembros de las fuerzas de seguridad murieron, dos de los cuales fueron encontrados decapitados, y 353 resultaron heridos, según la televisión estatal. Más de 2.000 personas fueron detenidas. El jueves por la noche, nuevas ráfagas de disparos se escucharon en las calles de Almaty, la capital económica de Kazajistán.