Pedro Sánchez está convencido de que aún tiene margen para llegar a ser presidente. El líder del PSOE considera que la situación en Cataluña tras el acuerdo entre Junts pel Sí y la CUP, que ha permitido la investidura de Carles Puigdemont, no complica sus planes para lograr articular un gobierno progresista. "Es más urgente que nunca propiciar un cambio en España", respondió a través de una entrevista en la Cadena SER cuando se le preguntó por la posibilidad de alcanzar una mayoría parlamentaria.

El candidato socialista insistió en que tenderá la mano "a izquierda y derecha" para intentar recabar los apoyos que necesita para lograr una mayoría alternativa a la del PP. El candidato socialista insistió en que tenderá la mano "a izquierda y derecha" para intentar recabar los apoyos que necesita para lograr una mayoría alternativa a la del PP.

Sánchez necesitaría los votos a favor de Podemos y las candidaturas de la confluencia y también de fuerzas nacionalistas o independentistas en el caso de que Ciudadanos votara en contra de su investidura. “La voluntad del PSOE es tender puentes y tender la mano a izquierda y derecha. Quiero entenderme tanto con Podemos como con Ciudadanos. Es mi voluntad”, comentó.

“A los tres nos une el cambio, un cambio progresista, un cambio reformista, un cambio que regenere nuestra vida democrática, que reconstruya el estado de bienestar dañado en estos últimos cuatro y un cambio que ponga fin a la fractura de convivencia en Cataluña”, explicó y aseguró que “la estabilidad se puede garantizar de muchas maneras, dentro y fuera del Gobierno. Lo importante es compartir una hoja de ruta y estoy convencido de que tanto con Podemos como con Ciudadanos podemos compartir buena parte de esa hoja de ruta, tanto en materia social como de regeneración democrática”.

Se mostró optimista sobre la posibilidad de conseguirlo, pese a que en el PSOE hay un convencimiento generalizado de que el acuerdo en Cataluña ha complicado aún más las aspiraciones de Sánchez. "La fortaleza no solo se mide en escaños, se mide en situar el terreno de juego en las soluciones y no en la confrontación", expresó que reiteró que no facilitará mediante la abstención que Rajoy se mantenga en la Moncloa.

Asimismo, se mostró dispuesto a que le apoye cualquier fuerza política aunque sea independentista. "No vamos a hacer ningún cordón sanitario. No es momento de fijar líneas rojas ni hablar desde atalayas". Sánchez sostiene que para lograr el acuerdo tendrán que "hablar de lo que nos une", aseguró.

Respecto a la celebración de un referéndum en Cataluña, una condición indispensable de Podemos para permitir que Sánchez llegue a Moncloa, el líder del PSOE ha reiterado que esa propuesta necesitaría una reforma de la Constitución, que es lo que su partido propone para solucionar el problema territorial. "Podemos tiene que decir si está a favor de cumplir la ley" expresó.

Del mismo modo también se mostró contrario a permitir que Podemos y las candidaturas tengan cuatro grupos en el Congreso, otra de las condiciones de negociación que facilitarían su entendimiento con los de Pablo Iglesias. "Es complicado", reconoció al mismo tiempo que recordó el reglamento de la Cámara Baja impide que formen grupos propios partidos que no han competido electoralmente.

También tuvo tiempo para defender que el Congreso no es una cámara territorial". "Si Podemos cree que para ellos es necesario tener cuatro grupos, lo que tendrá que hacer es impulsar esa propuesta en la reforma del reglamento del Congreso", zanjó. En cuanto a las tensiones internas que vivió el PSOE tras el 20D, Sánchez ha quitado hierro al asunto y aseguró que siente el respaldo de todo el partido, incluso de los barones más críticos que le impusieron duras líneas rojas en sus aspiraciones por llegar a Moncloa, entre ellos Susana Díaz.

También reveló que en la reunión de la Ejecutiva que los socialistas tienen este lunes propondrá que el Comité Federal que fijará la fecha del congreso en la que se juega su reelección se celebrará el 30 de enero. Esos sí, aseguró que “los congresos del PSOE son un valor no un lucha interna".

– Ver en Hechos de Hoy: Mariano Rajoy habló con Pedro Sánchez y Albert Rivera antes de su declaración