¿Qué pasa en Oriente Medio? ¿Qué sentimiento tienen los analistas y las previsiones de expertos? Proyectan un escenario sombrío.
El escenario es convulso en tres frentes de Oriente Medio:
– En la Franja de Gaza, el alto el fuego y la tregua entre Israel y Hamás es precario. El clima de conversaciones indirectas es muy inestable con la misión enviada por Benjamín Netanyahu volando a El Cairo y regresando a Jerusalén. Barack Obama sigue en segundo plano estas conversaciones y gestiones , con contrariedad porque se dejó en segundo plano a John Kerry.
– En Siria, siguen los combates feroces y el poder de la guerrilla yihadista, Estado Islámico (EI), la mayor nunca conocida en Oriente Medio, con brutalidad, odio y salvajismo. Bacher el Asad preside una nación que no controla en su totalidad porque las fronteras saltaron por los aires -el diseño geopolítico marcado tras la Primera Guerra Mundial-.
– En Irak, la situación es todavía más dramática ante el éxodo de 200.000 personas, la mayoría cristianos, huyendo de la guerrilla que puso la N de Nazarenos en sus hogares y domicilios. Es una persecución que ha denunciado muy enérgicamente Francisco -asunto que trató Hechos de Hoy-.
En Irak, la guerrilla tomó la ciudad de Sinjar, próxima a la frontera con Siria y centro de la minoría yazidí, la confesión que mezcla el zoroastrismo, el cristianismo y el islam. Los yihadistas les tacharon de "adoradores del diablo" lanzando un ataque despiadado contra ellos, pasando a cuchillo a 500 yazidíes y capturando a 500 mujeres que pasaron a ser esclavas sexuales.
En una huída atropellada, perdiendo todo, 50.000 yazidíes se han refugiado en el Monte Sinjar, en el noroeste de Irak, donde se encuentran atrapados. Unos cuarenta niños han muerto, según Unicef, bajo un ardiente calor, sin agua ni comida. Naciones Unidas, en base a testimonios recogidos, confirmó también la muerte de ancianos en estas escenas de pavor y terror. Esta comunidad yazidí -que forma parte étnicamente de los kurdos- vive en la región entre Irak, Siria, Turquía e Irán.
La guerrilla yihadista de Estado Islámico, estrictos del islam suní, persiguen como herejes a otras corrientes islámicas . Al resto de las religiones les han caificado de infieles. Han obligado a los cristianos a convertirse al Islam. Quienes se han rebelado les han decapitado y crucificado en escenas de salvajismo en Siria e Irak, vídeos que ha visto Francisco y le han hecho llorar como el mismo confesó. La guerrilla controla un amplio territorio entre Siria e Irak en el que han instarado su poder pleno y el califato.
Desde la toma de Mosul -la segunda ciudad de Irak– se han extendido por el norte y el este del país. Controlan en la región de Mosul la principal presa de Irak. En el norte están intimidando a los llamados peshmerga, las fuerzas armadas kurdas. De esta forma han llegado a Sinjar, la ciudad yazidí. La guerrilla es cada vez más poderosas por el armamento que han abandonado las tropas iraquíes en su huída. Estado Islámico cuenta ahora con artillería. La actual ofensiva yihadista se halla a 40 kilómetros de Erbil, la capital kurda.
En este escenario, Barack Obama anunció de forma solemne en la Casa Blanca, la nueva implicación de Estados Unidos en Irak. El objetivo inmediato será el de frenar el avance de la guerrilla sobre la capital del Kurdistán iraquí, Erbil, y el acoso a los yazidíes. Al autorizar los ataques aéreos, Obama dijo que el objetivo de esta misión es la de proteger al personal de Estados Unidos en Irak e impedir un genocidio de las minorías religiosas.
Es la primera intervención militar en Oriente Medio -y toda la zona de cadenas de crisis en el mundo árabe- desde el ataque de Estados Unidos y otros aliados de la OTAN en Libia, en 2011. Obama aprobó también el lanzamiento desde aviones militares de ayuda humanitaria para miembros de la minoría yazidí. Han intervenido tres aviones de transporte -un C-17 y un C-130- escoltados por dos cazas F/A-18, según confirmó el Pentágono. Lanzaron 72 paquetes con agua potable y paquetes de comida.
Obama ha tratado de no intervenir en Irak. ha enviado una pequeña expedición militar sólo para proteger la Embajada de Estados Unidos en Bagdad así como instalaciones estadounidenses. Señaló que no habría ataques aéreos si no se producía un acuerdo en Bagdad o el mismo Nuri al-Maliki daba un paso al costado y se retiraba del primer plano. Estados Unidos y Arabia Saudí mantienen la misma frialdad ante Maliki por sus políticas sectarias contra los suníes. Sin embargo es un escándalo para Arabia Saudí contemplar la brutalidad del sunismo más radical, el yihadismo despiadado contra los que califica de herejes e infieles. El retorno de Estados Unidos a Irak, y la luz verde de Obama a ataques aéreos, podría haber sido pedida por Arabia Saudí, que teme la extensión de la guerrilla islámica y su mensaje fanático y radical.