No se le esperaba hasta el sábado día 6 de abril, pero el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales ha llegado este miércoles por la mañana a España en un vuelo procedente de República Dominicana. A continuación, ha sido detenido quedando bajo custodia de agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en dependencias del aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas.

Rubiales ha adelantado su vuelta a España, prevista para el 6 de abril, y ha aterrizado en el aeropuerto madrileño de Adolfo Suárez Madrid-Barajas pasadas las diez de la mañana en un vuelo comercial de Iberojet tras haber realizado un viaje a República Dominicana por “cuestiones laborales”, según explicó el pasado 22 de marzo en declaraciones a Europa Press.

A su llegada a Barajas, agentes de la UCO lo han abordado en el avión y luego, acompañado por efectivos policiales, ha subido a pie de pista a un vehículo negro oficial de la Guardia Civil no logotipado. Rubiales ha sido trasladado a dependencias del aeropuerto madrileño. El programa de La Sexta, Al rojo vivo, logró las primeras imágenes de su traslado.

La previsión es que Rubiales quede en libertad en las próximas horas, a la espera de la citación o lo que ordene la juez de Majadahonda que investiga al expresidente de la RFEF por presuntas irregularidades en contratos de esta institución. Lo más probable es que sea citado en los próximos días.

Este lunes tuvo lugar en el alojamiento de Rubiales en Punta Cana un registro de la UCO por orden de la juez, y en el mismo se incautó el teléfono móvil y una tablet de Luis Rubiales. La operación de la Guardia Civil por posible corrupción en la RFEF indaga en las presuntas irregularidades en los contratos para jugar la Supercopa de España de fútbol en Arabia Saudí.

El pasado 22 de marzo, la juez dejó en libertad a Tomás González Cueto, que fue asesor jurídico externo de la RFEF con Luis Rubiales, y a Ángel González Segura, en su caso relacionado con la empresa que realizó obras en el estadio de La Cartuja de Sevilla.

La investigación con un total de siete detenidos se desarrolló por la UCO por presuntos delitos asociados a la corrupción en los negocios, administración desleal y blanqueo de capitales entre 2018 y 2023, cuando Rubiales estaba al frente de la RFEF, cargo que abandonó al ser inhabilitado por el beso a la jugadora Jennifer Hermoso tras ganar la selección femenina de fútbol la Copa del Mundo.

La Guardia Civil sostiene que Rubiales desvió al menos 3,8 millones de euros a la constructora Gruconasay y a la sociedad que explotó el estadio entre 2020 y 2022.  Supuestamente, esta empresa, a renglón seguido, transfería parte del dinero a una sociedad controlada por un íntimo amigo y socio de Luis Rubiales, Francisco Javier Martín Alcaide, alias Nene. Rubiales venía recibiendo “beneficios” de las sociedades de su amigo.

Por su parte, Rubiales ha negado en un avance de la entrevista que emite esté miércoles El Objetivo de Ana Pastor de La Sexta haber recibido “mordidas”, asegurando que el dinero que tenía en sus cuentas “es producto” de su trabajo y de sus “ahorros” y negando “las afirmaciones que han hecho los medios” sobre su dinero.

“Estoy hoy aquí para decir que es mentira que yo haya pegado una mordida con pisos aquí (República Dominicana). Que es mentira que tenga un equipo de béisbol (…), que haya pegado un pelotazo en Cabo Verde o que tenga terrenos para la construcción de hoteles en Arabia Saudí”, ha defendido el expresidente de la RFEF.