Twitter volvió a revolucionar a las fans de One Direction. Al parecer, Liam Payne y su pareja, Cheryl Cole podrían traer un bebé a este mundo, tal y como se ha rumoreado en los últimos días en las redes sociales.

Las fans de One Direction son unas auténticas fanáticas y cualquier cambio que hagan los chicos saltan las chispas. Liam cambió el estado de perfil de Twitter para poner: "Soy el hombre más afortunado del mundo". Algo que hace pensar a las directioners que el cantante podría estar esperando un hijo.

Asimismo, las seguidoras nunca desconectan de las redes sociales y se han percatado de que Cheryl hace mucho tiempo que no publica fotos suyas en Instagram y que en el nuevo anuncio que protagoniza para L'Oréal tiene la cara más gordita, ¿síntomas de una embarazada?

Está claro que las fans son muy observadoras, pero si hay una noticia que podría afirmar que la novia de Liam esta embarazada es lo que ha publicado la revista NOW. "Cheryl está muy centrada en la maternidad. Tiene muchísimos libros sobre este tema y que siempre está leyendo", reveló una fuente cercana a la cantante.

En cualquier caso ni Cheryl Cole ni Liam Payne han confirmado o desmentido los rumores. En caso de que sea cierto, otro miembro de la Boy Band británica sería padre.

La que fuera vocalista del grupo femenino Girls Aloud cumplió 33 años hace poco y, para ello, Liam le habría comprado un regalo que sin duda no pasará desapercibido para ninguno de sus seres queridos: un anillo de diamantes negro envuelto en rubíes que, como publica el periódico Daily Star, ha activado todas las alarmas ante una incipiente boda entre los dos artistas.

"Al principio parecía que el noviazgo iba a tambalearse antes de llegar a su primer mes. Pero la pareja ha logrado acallar a todos los que no creían en su amor y ahora una pedida de mano podría ser más que posible", informó al mismo diario un portavoz de la casa de apuestas William Hill, donde las probabilidades de un posible compromiso son cada vez más altas entre sus usuarios.

Aunque antes de hablar de campanas de boda para los dos enamorados, quienes llevan con aparente naturalidad su diferencia de edad, Cheryl tiene que cerrar definitivamente el proceso de divorcio de su aún marido, Jean-Bernard Fernandez-Versini, estancado en los tribunales por las discrepancias que ambos mantienen en cuestiones financieras.