La NASA ha anunciado una alineación cósmica inusual, con Venus, la Luna y Júpiter como protagonistas. Los tres cuerpos lucirán cuando el Sol se ponga en el horizonte y podrán verse a simple vista, sin la ayuda de un telescopio o cualquier instrumento de observación astronómica.

El acercamiento entre los tres cuerpos se produjo a primera hora de la mañana, pero la luz solar impidió que se pudiera apreciar. Sin embargo, con la llegada de la noche, el fenómeno luce con todo su esplendor. Los planetas y el satélite brillarán a una altura muy baja, muy cerca del horizonte, en una alineación inusual que desprende una gran belleza, tal y como han explicado los científicos de la NASA.

En este tipo de alineaciones, el planeta Venus brilla en el crepúsculo, mientras que la Luna se muestra creciente con un brillo que pone de manifiesto toda su superficie. Este efecto es conocido como "el resplandor Da Vinci", ya que el pintor italiano fue el primero que supo reflejar este tipo de imagen en el lienzo. Junto a ellos luce Júpiter, aunque de forma mucho más tímida y a una mayor distancia.

La imagen resulta aún más espectacular con la ayuda de un telescopio, ya que el amante de la astronomía puede apreciar las nubes y las lunas que giran en torno a Júpiter, la superficie de la Luna, así como sus cráteres y relieve, y el resplandor de Venus, que brillará con un 85% de su máximo de luz.

Este fenómeno de alineación de los planetas se produjo en febrero de 2008. En esta ocasión, la imagen será visible en la noche del lunes al martes y será necesario presenciarlo desde un punto elevado para poder observar todo el horizonte.

Los cuerpos alineados brillan en el firmamento