Cada año de fútbol es distinto. Las tendencias y los resultados nunca suelen ser los mismos, pese a que algunos equipos sigan manteniéndose firmes en lo más alto de sus campeonatos. El FC Barcelona, la Juventus, el Paris Saint Germain y el Bayern Munich hacen prácticamente lo que quieren en sus respectivos torneos nacionales. Cada año, lo que se renuevan son los rivales y los equipos sorpresa que pueden intentar sacarles unos puntos y dar un toque más emocionante a los campeonatos.
Este año, de hecho, la Premier League parece estar muy peleada, con el Liverpool como líder y el Manchester City como segundo que disputan una liga que el año pasado fue de los de Guardiola desde el primer momento. En campeonatos tan apretados, como es exactamente el caso de la Premier, cualquier resultado puede cambiar la tónica de un equipo, como bien demuestran las últimas actuaciones. De paso va un análisis de cómo los empates influyen en el fútbol.
En la Premier, donde el Liverpool empató en tres ocasiones y el City en dos, la diferencia de 4 puntos la hacen las derrotas. En tres ocasiones los de Guardiola se han quedado sin puntos, mientras los de Klopp han perdido solamente un partido.
En la siguiente infografia de Bwin, de hecho, se puede notar el peso de los empates en las principales ligas de Europa. En la Premier 1997-98, es decir la primera del Arsenal de Wenger, sin empates el campeón hubiera sido el Manchester United. Muy a menudo, entonces, lo que sirve no es empatar sino ganar un partido.
La razón de este concepto es sencilla: desde que se otorgan tres puntos por victoria y uno solo por empate, conseguir ganar al rival ha sido siempre la condición absoluta para ponerse en ventaja sobre los demás y sacar cuanta más distancia posible sobre los clubes rivales.
El caso de los empates es importante sobre todo el los choques directos, porque el reparto de un punto cada uno permitiría a los que están por arriba quedarse con la ventaja.
Si en cambio tomamos en consideración la Liga Santander de este año vemos como son los empates los que están haciendo la diferencia entre el FC Barcelona, primero, y el Atlético de Madrid, segundo. El equipo de Diego Pablo Simeone lleva 8 empates contra los 4 de los de Ernesto Valverde, que han ganado 3 partidos más.
En total, los 5 puntos de diferencia se deben a una falta de contundencia en ataque de los del "Cholo", que son maestros en el arte defensivo pero que no consiguen dar con la tecla para romper las retaguardias rivales. El Barça, por su parte, es una máquina de gol, ya que hasta ahora ha anotado 58 tantos, es decir, casi el doble del Atleti, que se ha quedado en 32.
En definitiva, los detalles en el fútbol pueden ser clave. Empatar o ganar un partido cambia totalmente de perspectiva. Y puede ser capital de cara al resultado final.