¿Debe implicarse hasta sus últimas consecuencias un presidente en la lucha política al final de su mandato? Barack Obama no lo duda (ver en Hechos de Hoy, Alicia Keys, Lena Dunham, Elizabeth Banks y Meryl Streep con Hillary Clinton).
El presidente no tiene ninguna duda sobre los efectos negativos que tendría para Estados Unidos una victoria de Donald Trump. No sería una victoria del Partido Republicano sobre el Partido Demócrata. Sino un giro radical y de egos, un populismo que dividiría en canal a los Estados Unidos. El trumpismo arruinaría además el legado de Barack Obama. Ni George W. Bush ni Bill Clinton se implicaron tanto en la defensa de sus sucesores.
Antes de comenzar sus vacaciones, el 4 de agosto el presidente cumplió 54 años. Fue su octavo y último cumpleaños en la Casa Blanca. Barack Obama llegó con 47 años a la presidencia, el quinto presidente más joven de la historia del país detrás de Theodore Roosevelt (42), John F. Kennedy (43), Bill Clinton (46) y Ulysses S. Grant (46).
El 4 de agosto de 2009 el presidente celebró su cumpleaños llevando una banja de pasteles a la histórica periodista Helen Thomas que cubrió durante cinco décadas la Casa Blanca.
El pasado 3 de agosto de este 2016 el presidente sonrió cuando desde el público comenzaron a cantarle el feliz cumpleaños, en el inicio de su discurso en un evento de jóvenes líderes africanos en el Omni Shoreham Hotel en Washington.
El presidente se siente agradecido y honrado con el alto nivel de aprobación. Es un líder querido y respetado. Barack Obama lo tiene muy presente a la hora de no defraudar al país. Se abren días de descanso para Barack Obama pero también de reflexión.
