Hoy por hoy, una de las mejores soluciones para lograr un crédito que nos permita superar una necesidad o realizar una compra es la de acudir a un crédito exprés.
Las duras restricciones del sistema financiero español, que quiere comenzar a conceder créditos de manera más fácil, no hace otra cosa que confirmar el hecho de que los particulares, pymes o autónomos que han logrado superar la crisis se lanzan a la búsqueda del crédito exprés fuera del mercado bancario para resolver alguna necesidad. Las compañías de seguros lo saben bien, porque se ha elevado el número de siniestros domésticos por el bajo nivel de mantenimiento de los últimos seis años, y por el notable incremento de las reparaciones sobre la compra de material nuevo. Todo ello requiere pequeñas inversiones que son cada vez más necesarias y urgentes.
La situación que presenta a día de hoy el acceso a los créditos bancarios por parte de las familias y de las empresas sigue una línea de endurecimiento o estancamiento.
Todo el que haya superado la crisis financiera requiere ya financiación para acometer nuevos proyectos, especialmente la renovación de equipamientos como las pequeñas inversiones que requieren los ordenadores o un vehículo nuevo. De esto, pymes y autónomos saben bien de lo que se habla, y de las dificultades que se encuentran para encontrar crédito.
Con las condiciones actuales del mercado bancario, no queda otra solución que acudir al llamado crédito rápido o exprés. Con este tipo de préstamos suele facilitarse la vida al cliente, ya que las plataformas hacen uso de una tecnología sencilla e innovadora que facilita la obtención de dinero de forma rápida y sencilla. Suelen ofrecerse préstamos rápidos online desde 300 hasta 5.000 euros, a pagar desde en 3 cuotas hasta 48 cuotas, con la gran ventaja de que el cliente puede tener la confirmación de la aceptación de su solicitud y del dinero en su cuenta bancaria en cuestión de unos pocos minutos.
Este sistema ya se emplea en casi todos los países de Europa, y España se ha sumado a esta nueva moda de financiación de cualquier necesidad, desde comenzar su propio negocio, hasta acogerse a una oferta para realizar un viaje o simplemente cubrir un imprevisto, acometer obras de mejora o realizar un mantenimiento.
Según los expertos, existen sectores económicos, profesionales y pymes excelentemente bien implantados localmente que requieren la renovación de equipamientos tras haber superado la crisis. También hay particulares que necesitan acometer obras de mejora o mantenimiento en sus casas, tras haber aplicado medidas de austeridad que han impedido la más mínima inversión.
El llamado crédito rápido, urgente o exprés, es hoy una fórmula alternativa e innovadora que se ha venido implantando en el mercado y cuyo objetivo es atender las necesidades financieras de los consumidores y revolucionar la forma y el tiempo que tarda la banca tradicional en evaluar y conceder préstamos.
La imagen de los créditos rápidos era que contaban con tipos de interés muy alto, pero su popularidad en nuestro país ha ido creciendo en los últimos años de forma notable, debido principalmente a la gran demanda de soluciones rápidas de crédito para necesidades puntuales y, por la otra, por la falta de acceso a préstamos y créditos por parte de las entidades financieras en las que solemos tener cuenta corriente.