Había mucho en juego para el equipo de Tata Martino que ha acumulado un montón de vicisitudes internas. El camino parece ahora más despejado. Antes del encuentro pesaban estas tensiones en Tata Martino como apuntó Hechos de Hoy. Con esta victoria, todo puede ser diferente para un momento feliz en el equipo de Lionel Messi y Andrés Iniesta, sus hombres claves. Dos victorias en octavos de final de la Champions que aparecen golpes muy certeros. El FC Barcelona y el Paris Saint Germain (PSG) pusieron un pie en cuartos de final.
El Paris Saint Germain fue contundente. El equipo de Laurent Blanc se impuso con los dos goles de Zlantan Ibrahimovic, y otros de Matuidi y Cabaye. El Bayer Leverkusen no pudo presentar batalla. Quedó aplastado por un PSG que no ha perdido su brillo en la gran pelea continental.
En el Etihad Stadium se trató de una noche diferente. El Manchester City del jeque Sulaiman Al-Fahim ha hecho un esfuerzo de primer orden, económico y deportivo, para auparse a un primer plano. Contratar a Manuel Pellegrini como entrenador fue un acierto. Pero el sueño europeo puede desvanecerse.
Un penalti a Messi que se produjo fuera del área puso en ventaja al FC Barcelona, que reclamó un penalti y un gol mal anulado. Dani Alves propinó un segundo golpe que puede ser definitivo. El Manchester City reclamó que Demichelis trabó a Messi fuera del área y, además, que antes Busquets hizo falta a Navas. Se reclamó mano de Clichy. El Manchester City solicitó un agarrón de Mascherano. El FC Barcelona también se quejó de un gol mal anulado.
La batalla no puede quedarse en los árbitros. El Manchester City ha avanzado mucho pero no tiene el empaque y oficio que logró el Manchester United. Por decirlo de forma generosa, el Manchester City es grande pero todavía no lo descubrió del todo. No ejerce su autoridad en el campeonato europeo. Jugó incluso con cierto sentido de inferioridad del que el FC Barcelona se aprovechó con dos golpes que le han dejado tambaleando a su rival.
El Manchester City puede reivindicar su honor y llegar la sorpresa. Andrés Iniesta avisó de ello pero por lo visto en este primer partido parece tarea muy ardua para Manuel Pellegrini el de lograr un vuelco psicológico en sus jugadores para sorprender en el Camp Nou. De principio a fin fue un duelo estratégico, excesivo.
En sus análisis, en lo que se vivió como un duelo latino entre dos grandes entrenadores, Tata Martino se refirió al gol anulado al FC Barcelona "en el que Cesc estaba habilitado". Alabó la buena actuación de sus jugadores. Manuel Pellegrini criticó por su parte al árbitro Jonas Erikkson. “El árbitro pitó penalti por una mano fuera del área”, dijo con razón. Pero ese es otro debate. Hubiera quedado en segundo plano si el Manchester City hubiera desencadenado toda su pólvora. No lo hizo y puso en peligro su futuro en la Champions.