En las nuevas encuestas de Sigma Dos para El Mundo, ningún partido logra mayoría para gobernar en solitario en las grandes ciudades de España (Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Bilbao). Es el gran cambio y el escenario del vuelco político que subrayaron analistas a Hechos de Hoy.
El PP ganaría las elecciones municipales en Valencia y Sevilla. CiU sería la lista más votada en Barcelona. Y el PNV triunfaría en Bilbao. Pero ninguno de esos partidos obtendría la mayoría suficiente para gobernar en solitario y tendrían que pactar con otra formaciones.
En Barcelona, según el sondeo, CiU volvería a ganar las elecciones, pero con entre 3 y 4 concejales menos que hace cuatro años (obtendría entre 10 y 11) y quedaría a dos puntos de la segunda opción más votada, Barcelona en Comú, encabezada por la exactivista Ada Colau. Ciudadanos sería la tercera formación con más apoyos y obtendría 6 escaños, seguida del PSC, con el que empataría, y del PP, que obtendría entre 4 y 5 representantes. ERC perdería casi tres puntos en intención de voto y la CUP -la otra opción independentista- conseguiría el 5 % de los votos necesarios para obtener representación municipal.
En Valencia, el PP representado por la alcaldesa actual, Rita Barberá, ganaría las elecciones municipales, si bien con 20 puntos menos que hace cuatro años y entre 11 y 12 concejales, frente a los 20 que tiene ahora. El PSOE -en la actualidad segunda fuerza política en la ciudad de Valencia– quedaría relegado a la cuarta posición y por delante aparecerían Ciudadanos (con 6 concejales) y Compromís, que lograría entre 5 y 6.
La lista del PP a la alcaldía de Sevilla que encabeza Juan Ignacio Zoido ganaría las elecciones pero perdería apoyos y pasaría de los 20 representantes que tiene en el Ayuntamiento a contar con entre 12 y 13, uno o dos más que el PSOE, al que ahora saca 9 escaños, y a continuación estarían Ciudadanos, con 3, e IU que tendría dos representantes.
El PNV, con Juan María Aburto, sería el partido más votado en Bilbao y también en este caso perdería apoyos respecto a mayo de 2011, al pasar de 15 a 13 concejales, es decir, no lograría la mayoría absoluta. Por detrás quedaría Bildu con entre 4 y 5 concejales; Udalberri (Bilbao en común) con el mismo número de escaños y después el PP, que bajaría de 6 a 4; el PSE con 3, mientras que no lograría ningún representante.
La excepción Aguirre y los otros casos
En estas encuestas es muy significativo el enorme empuje de Esperanza Aguirre, su frenética campaña, y el carisma recuperado. Logra el 36% de los votos, y 16 puntos más que su inmediata rival, Manuela Carmena, que encabeza la coalición en la que se presenta Podemos.
En Valencia, Rita Barberá logrará también un resultado mejor que el de su partido con un 31,3% de los votos. Pero ni Esperanza Aguirre ni Rita Barberá pueden frenar el desgaste del Partido Popular. No lograrán la mayoría absoluta. Necesitarán pactar, En este escenario, las encuestas están indicando que Ciudadanos quedó estancado en su crecimiento.
En Bilbao, está presente el legado de quien fue mítico alcalde, el querido Iñaki Azkuna, fallecido hace un año. Juan María Aburto, del PNV, está al filo de la mayoría absoluta. La irrupción de Udalberri -la marca de Podemos, que con un 14% de los votos empata con EH/Bildu, golpea a PSOE y PP sin afectar al nacionalismo moderado.
En Sevilla, el escenario es diferente, con empate entre PP y PSOE. Juan Ignacio Zoido sufre un retroceso de casi 15 puntos.
En Barcelona se proyecta un Ayuntamiento de extrema complejidad. CiU logra una tímida mejoría y, con el 22,7%, sería la fuerza más votada, desplazando a Barcelona en Comú, la formación de Ada Colau. Pero el Ayuntamiento quedará tan fragmentado que se necesitarán acuerdos entre cuatro o cinco partidos para lograr mayorías. Con matices, y diferencias marcadas, Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Bilbao están enviando el mismo mensaje de habilidad negociadora -tacto, prudencia y diálogo- que se exige en las encuestas al negar las mayorías absolutas.
