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Franz Welser-Möst dirigiendo a la Filarmónica de Viena. (Foto: Medici.TV/YouTube)

FILARMÓNICA DE VIENA

El Maestro Franz Welser-Möst dirige el Concierto de Año Nuevo con grandes sorpresas

Desde Viena a casi 100 países suena la música el 1 de enero, este año con muchas joyas inéditas y por primera vez con la intervención del Coro de Niñas perteneciente a los Niños Cantores de Viena.

Hechosdehoy / UN / O. R. Ferreiró

RTVE retransmitirá un año más el evento más famoso del mundo que se podrá ver en casi cien países y será seguido por unos 55 millones de personas. El tradicional Concierto de Año Nuevo de la Orquesta Filarmónica de Viena alcanza su 83ª edición. Por tercera vez (2011, 2013 y 2023) será dirigido por el maestro austriaco Franz Welser-Möst, de 62 años, que ha dirigido casi todas las óperas importantes y es director habitual del Festival de Salzburgo. Welser-Möst comenzó en la música como violinista, pero un accidente de coche le hizo cambiar de rumbo. Desde 2002 es director titular de la Orquesta de Cleveland y tiene contrato hasta 2027.

La orquesta interpretará célebres piezas de la dinastía Strauss y de otros autores vieneses de la época, como Carl Michael ZiehrerFranz von Suppè y Josef Hellmesberger. Este año las Niñas y los Niños Cantores de Viena actuarán juntos en la polca Espíritus alegres. Las últimas apariciones de los Niños Cantores de Viena en este concierto fueron en 2012 y 2016. Para las niñas será la primera vez.

El periodista de RTVE experto en música clásica Martín Llade comentará, por sexta vez el concierto que se podrá seguir a través de La 1, TVE Internacional (para Europa), Radio Nacional, Radio Clásica, y RTVE Play. 

El Concierto de Año Nuevo es una producción de la televisión austriaca ORF en coproducción con la UER. Desde la Sala Dorada del Musikverein de Viena, adornada con flores frescas de los jardines de la capital austriaca , la Filarmónica deleitará al público en la primera parte del concierto con la polca rápida ¿Quién baila?, de Eduard Strauss; el vals Poemas heroicos, de Josef Strauss; la cuadrilla El barón gitano, de Johann Strauss hijo; el vals En una noche acogedora, de Carl Michael Ziehrer y la polca rápida ¡Venid con alegría!, de Johann Strauss hijo.

Polka “¿Quién baila conmigo?

En la segunda parte, la obertura de la opereta cómica Isabella, de Franz von Suppè, el vals Perlas de amor y la Polca de Angélica, de Josef Strauss; la polca rápida Arriba y lejos de Eduard Strauss, y la polca francesa de Josef Strauss Espíritus alegres, con los coros de las Niñas y los Niños Cantores de Viena, que actuarán juntos.

Le seguirán la polca rápida Para siempre y el vals Jilgueros, de Josef Strauss, y la Polca de las campanas y galope del ballet Excelsior, de Joseph Hellmesberger. También de Josef Strauss, el Allegro Fantástico y el Vals de las Acuarelas, que cerrarán esta segunda parte.

El concierto, que se celebra cada año desde 1941, finaliza con varios bises. El maestro Franz Welser-Möst y los músicos tocarán el galope de los Bandidos, de Johann Strauss hijo, y a continuación felicitarán el Año Nuevo. Se despedirán, como siempre, con el vals En el bello Danubio Azul (An der schönen blauen Donau) de Johann Strauss hijo y la Marcha Radetzky, de Johann Strauss padre que sonó por primera vez en este concierto como primer bis en 1946 bajo la dirección de Josef Krips.

El programa del intervalo, entre las dos partes del concierto, está dedicado este año a la Exposición Universal de Viena de 1873, con motivo de su 150º aniversario. Con la participación del maestro Welser-Möst y varios profesores y ensembles de la Filarmónica llevarán al espectador desde el Musikverein hasta el Prater, por los mágicos lugares de la Expo a través de imágenes sorprendentes.

El Ballet Estatal de Viena, uno de los más importantes del mundo, intervendrá con tres actuaciones, con un total de 11 bailarines, bajo la coreografía del británico Ashley Page. Interpretará el vals de Perlas de amor (Josef Strauss) en el Palacio de Laxenburg, con cuatro parejas de baile. Y la polca rápida Arriba y lejos (Eduard Strauss), interpretada por una pareja de bailarines en el pabellón del jardín de la histórica Abadía de Melk. Finalmente, en el interior del monasterio de Melk, la danza del vals de El Danubio azul con cinco parejas.

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