Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) fueron concluyentes. El Índice de Precios de Consumo (IPC) se situó en su nivel más bajo desde 2009 abriendo escenarios complejos.
En una primera proyección es bueno para el consumidor. Para las empresas depende de la rebaja de costes. En la lectura macroeconómica representa una preocupación para los analistas del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Central Europeo (BCE). Se encienden de nuevo las alarmas -y es asunto que sigue con cuidado Mario Draghi como destacaron analistas a Hechos de Hoy– sobre el peligro de una deflación, el escenario de una caída continua de los precios.
Los datos del INE
En términos intermensuales, las principales razones del retroceso han sido las rebajas. El mayor retroceso se ha producido Navarra (con una tasa negativa del 1%), seguida con un descenso de seis décimas por tres comunidades con tasas negativas, Castilla-La Mancha (0,8%), Castilla y León (0,5%) y País Vasco (0,1%).
Los precios retrocedieron un 0,3% entre julio de este año y el mismo mes del año pasado, según ha confirmado este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este dato supone la vuelta del IPC al terreno negativo después de que en junio, ese índice interanual se situara en 0,1%. Ésta es la mayor caída de precios desde octubre de 2009, cuando el índice de precios de consumo registró un descenso fue del 0,7%.
Detrás de la bajada de julio se encuentran el abaratamiento de alimentos y bebidas no alcohólicas, la estabilidad de los precios de los carburantes -que contrasta con la subida que tuvieron un año antes- y el retroceso de los de la electricidad, que redujo los gastos relacionados con la vivienda.
Si se comparan los precios al consumo de julio con los de un mes antes, se comprueba que cayeron un 0,9%. La tasa interanual de la inflación subyacente (es decir, descontado el efecto de los precios de alimentos no elaborados y productos energéticos) se mantuvo en el 0%. Mientras, el IPC armonizado -el que sirve para comparar con el resto de la Unión Europea- se situó en -0,4%.
Entre los grupos que más repercutieron en la disminución del IPC, el INE destaca el de transporte, por su peso en el índice general. La tasa interanual de este sector se situó en un 0,1%, un punto inferior a la del mes anterior. "Esta disminución se debe a la estabilidad de los precios de los carburantes y lubricantes, frente al aumento registrado en julio de 2013", explica la oficina estadística.
También influyó la variación en el grupo de gastos relacionados con la vivienda, cuya tasa interanual quedó en 1,2%, nueve décimas por debajo de la registrada en junio "como consecuencia de la disminución de los precios de la electricidad", especifica el INE.